Bueno, chicas, aquí dejo mi crítica sobre el último libro publicado de la saga de los cárpatos. Es la primera vez que escribo una crítica -¿es aquí donde se ponen, no?- ¡¡así que no seáis muy duras!!


Crítica de Depredador oscuro, de Christine Feehan


Depredador oscuro o el libro de Zacarias

Desde que nos encontramos por primera vez con los hermanos De la Cruz, muchos lectores quedaron intrigados por el mayor de ellos. Zacarias De la Cruz. El primogénito de la familia apenas se mostraba en los libros. Se le mencionaba con respeto, con reverencia, incluso con miedo. Su nombre, más que pronunciarse, se susurraba. Zacarias era un puzzle del que la autora, Christine Feehan, apenas arrojaba piezas para completarlo. Poco se sabía de él. Feehan lo envolvió en un manto de misterio y lo separó del resto de cárpatos, incluso de sus hermanos. En alguna ocasión, la autora dijo que había pensado sacrificar al mayor de los De la Cruz. Sin embargo, finalmente reculó y decidió explicárnoslo. Así llega a nosotros. El mayor de los De la Cruz. Depredador oscuro es su libro. El libro de Zacarias. Completamente suyo.

Los que conocen a Feehan saben que cuando escribe una historia es la historia de una pareja. Y, desde luego, en este libro ha predominado la trama romántica sobre la acción. Era necesario. Zacarias es un personaje complejo, difícil y profundamente herido. Feehan lo sabía y, quizá, sabedora de que el cárpato conseguiría eclipsar a su protagonista femenina, la autora recurrió a una táctica que ha resultado reveladora. En los meses antes de la publicación del libro, Feehan escondió a la joven de los ojos de los lectores y decidió no revelar el nombre de la elegida. Era el paso previo a la introducción de un nuevo tipo de protagonista femenina. Porque, al contrario que sus predecesoras, Marguarita Fernández no se presenta como un personaje complejo y completamente definido. No. En esta ocasión, la compañera del cárpato ha sido creada a partir de él y en torno a él. No se ahonda en ella sino que a través de Marguarita conocemos a Zacarias. Y para ello, la escritora nos presenta a una pareja de opuestos. Él es un antiguo que ha caminado a través de los tiempos hacia un mundo moderno que no entiende -aunque tampoco le importa-. Zacarias solo sabe luchar. No se mezcla con humanos ni siquiera con los de su especie. Permanece aislado. En cambio, Marguarita es una joven que nace en el mundo moderno. Crece arropada por amigos y familiares y no concibe una vida sin el contacto con los demás.

Y así, Feehan enfrenta lo antiguo con lo moderno. Zacarias contra Marguarita.

Durante casi la primera mitad del libro, la autora va creando una tensión ascendente entre ambos personajes. Sin embargo, no se produce un gran choque entre ellos. Y esto es debido, fundamentalmente, a Marguarita. A pesar de que la joven se rebela en diversas ocasiones, lo cierto es que en ella prima la creciente necesidad de salvar a Zacarias. De este modo, Feehan, a través de la joven, consigue desentrañar y desvelar los secretos del primogénito de los De la Cruz. Es ella la que nos explica cuál es el problema de Zacarias, y mira a través de él, directamente a su oscura y agujereada alma. Ella misma se lo dice en varias ocasiones: “Te veo”. Y así es. La joven mira y ve más allá de todos los demás, incluso del mismísimo Zacarias.

De esta manera, antes de cruzar el ecuador del libro, la pareja consigue alcanzar cierto equilibrio entre ellos que hace que la relación llegue a estancarse un poco. Sin embargo, Feehan recupera el ritmo y no decepciona. Sin que apenas el lector se dé cuenta, la autora precipita la acción y presiona a los personajes hasta provocar una ruptura del equilibrio creado. Aunque un poco apresurado, y sacrificando la trama de acción del libro, Feehan consigue atrapar nuevamente al lector en la dinámica de los dos protagonistas, logrando, incluso, que Zacarias evolucione y muestre nuevos matices a los lectores.

Una de las sorpresas más inesperadas de Depredador oscuro es que nos lleva al origen de los De la Cruz y nos deja ver a los hermanos como nunca antes. Nos encontramos con unos jóvenes De la Cruz -jovencísimos, Riordan es apenas un bebé-. Y como niños que son, los vemos asustados, inexpertos, y testigos de una tragedia que marcaría el destino de todos ellos, en especial el de Zacarias. Tan demoledor es ese pedazo de su pasado que los De la Cruz deben hacer más que una promesa, es un voto solemne de callar para siempre lo sucedido. Esto marca el final de los hermanos tal y como eran. Es tiempo de sus últimas lágrimas y lamentos, y todos lo entienden así. Este es un importante punto de inflexión en sus vidas. Todo ha cambiado, en especial para el mayor de los hermanos. A partir de ese momento, el peso de lo que ha hecho cae sobre Zacarias como una terrible revelación que lo transforma en el cazador solitario, oscuro, frío e insensible que conocemos.

Y también lo condena.

Es gracias a este pequeño fragmento de su pasado donde entendemos porqué Zacarías es diferente a sus hermanos a pesar de que los cinco De la Cruz siempre han admitido que hay una mayor oscuridad en todos ellos respecto al resto de cárpatos. Y es por esto mismo que Feehan nos presentará una nueva forma de relación carpatiana, nunca antes vista y que no dejará indiferente a ningún lector.

En cuanto a las tramas paralelas, la autora ha aparcado, en esta ocasión, casi todas las historias que ha ido desarrollando en los libros anteriores de esta saga. No hay mención al malvado mago Xavier, no se avanza en la búsqueda y las alianzas del pueblo cárpato con las otras especies. Apenas se incluye una ligera mención al Centro de Investigación Morrison y poco -o más bien nada- se dice sobre la conspiración de los vampiros.

En Depredador oscuro, Feehan tira de un hilo argumental que ya conocíamos, es un esquema ya usado. La sociedad humana contra el no-muerto. Lo hemos leído en sus libros anteriores, por eso no sorprende demasiado y tampoco aporta mucho.

Lo mismo sucede con el enfrentamiento entre Zacarias y el maestro vampiro. Es una lucha que ya hemos visto con anterioridad. Cárpato antiguo, guerrero y poderoso se enfrenta al enemigo de su pueblo: el no-muerto. No es nada novedoso. Feehan nos ha ofrecido este careo antes y ahora vuelve a hacerlo. La diferencia es que, en esta ocasión, nos encontramos con un rival que la autora ha estado reservando para el mayor de los De la Cruz. No podía ser de otra manera. Es el regalo de Feehan a Zacarias.

En cuanto al estilo narrativo de Depredador oscuro, no hay ninguna sorpresa para todos aquellos lectores asiduos a los libros de esta autora. Al igual que en anteriores obras, Feehan hace uso de oraciones largas y cargadas de adjetivos con las que realiza exhaustivas descripciones de sus personajes, de las acciones y de los escenarios. Tiene tendencia a divagar y machacar las mismas ideas en repetidas ocasiones, lo que puede provocar cierto cansancio por parte del lector.

Sin embargo, el modo en que la autora maneja a sus personajes y los giros inesperados con los que nos encontramos en esta historia, consiguen sumergirnos en el mundo que Feehan creó para sus cárpatos.

Depredador oscuro, la última historia de los hermanos De la Cruz, llega hasta nosotros para mostrarnos que, a pesar de llevar más de veinte libros a su espalda sobre esta saga, Feehan aún se guarda algunos ases en la manga y todavía es capaz de sorprendernos. Sea como sea, la historia de Zacarias -y Marguarita- no dejará indiferente a ninguno de los amantes de los cárpatos.

Bravo, Sahsa, no podría haberlo dicho mejor yo misma

¡Gracias por la crítica Sasha!

Te la acabo de enlazar en el listado.

Pero te he editado un poco el título del hilo porque el libro acaba de salir en inglés, así que he puesto el título en inglés. Espero que no te importe.

Claro que no me importa, Mirada!! No había caído en lo del título en inglés... lo traduje automáticamente. Gracias por la corrección!!