ARGUMENTO

Truvin Stone se despierta tirado en un callejón sin recordar nada de su vida. Lo único que encuentra a su alrededor es una nota citándole en una iglesia. Allí, en contra de su voluntad, es bautizado e impelido a huir para ser cazado.

Sin otra alternativa, sale huyendo y se topa con Lucy Morgan, una periodista que se dedica a desmentir mitos. Aunque accidentadamente, consiguen huir y se refugian en casa de Lucy. Juntos y a medida que Truvin vaya recordando retazos de su vida, irán descubriendo la vida pasada de Truvin y componiendo el puzle que le llevará hasta sus perseguidores.



Uno de los puntos positivos que tiene el libro es que, a pesar de pertenecer a una saga empezada, como el protagonista está amnésico, vas descubriendo su mundo a la vez que él. A excepción de un par de personajes que salen al final, no te enterarías de que el libro pertenece a una saga (lo cual, a mí me ha venido bien porque es el primero que leo).

Entrando en la historia, es bastante irónico que Lucy se encuentre haciendo un reportaje para desmitificar a los vampiros cuando atropella con su coche a uno. Claro que al principio, ninguno de los dos lo sabe.

El principio es bastante misterioso. Ves que han capturado al prota, le bautizan y le dejan huir para empezar una cacería. Quizás si has leído los libros anteriores, puedes imaginar a qué viene esto, pero como yo no había leído ninguno, me tenía bastante intrigada. Es decir, por la sinopsis sabes que el prota es vampiro, pero le bautizan y no le pasa nada. Es como muy intrigante. Luego vas descubriendo el asunto, pero lo cierto es que la historia me tuvo bastante intrigada con el tema.

De los protas, decir que sienten una atracción inmediata y en cierta manera por esto, sin darse cuenta, Truvin comienza la transformación de Lucy, lo que le lleva medio libro a intentar que ella sobrepase el periodo en el que puede acabar convertida aunque eso pueda traer consecuencias. Por su parte, Lucy no tiene ninguna pega en convertirse en vampiro así que empieza una guerra de voluntades.

Por si no habéis leído nada de esta saga, comentaros que el “mundo paranormal” no se limita a los vampiros. Aquí hay de todo y lo más complejo es la guerra que hay entre vampiros y brujas, que por cierto, me ha alucinado la caradura que tienen las brujas frente a la “iniciativa” de Truvin con respecto a esta guerra. Si leéis el libro, sabréis porqué lo digo.

Lo curioso es que en el libro se ve que la autora no quiere partidismos entre vampiros y brujas. Al principio me llamó la atención que no las pusiera de malas para arriba puesto que eran las enemigas naturales del prota, pero después descubres que la prota de alguno de los libros anteriores, lo era. Así que supongo que de ahí radica esa atenuación sobre quiénes son buenos y malos en este mundo.

Lo que sí voy a hacer es dejar un apuntillo sobre el final, que me dejó un poco chafadilla. No es que acabe mal porque acaba bien, pero no acaba todo lo bien que podría haber acabado. ¿Es algo así como lo que pasa al final de “Amante desatado”, que acaban bien pero a la prota le pasa X cosa (que no voy a revelar) que te deja un sabor agridulce? Pues aunque no es tan “gordo” como lo de ese libro, sí que te quedas un poco con las ganas de que hubiera acabado bien del todo.

En general, el libro es entretenido. Corto y rápido de leer. Si queréis animaros a leerlo podéis estar tranquilas que se puede leer sin necesidad de haber leído los anteriores.