Chicas... ¿jugamos?

Lo de la gargantilla me suena pero Chicas... ¿jugamos? - Página 24 198644

no lo tengo muy claro; Un trozo más?

—AMIGODECABEZOTA —comenzó a decir inocentemente—, ¿recuerdas haber dicho que RIVALDESUERTUDA necesitaba una rival? ¿Alguien lo bastante exótica como para quitarla del juego e inclinar la balanza a mi favor?
AMIGO frunció el ceño desconcertado. Y luego al caer en la cuenta un brillo como un amanecer se reflejó en su rostro.
Y rápidamente se volvió una señal de alarma.
—No, CABEZOTA. No, no, no. Te has vuelto completamente loco. Jamás resultaría.
—Pero mírala, AMIGO —dijo CABEZOTA aguadamente—. Escúchala. Podría llegar a resultar. Puliéndola un poco podemos hacerla pasar como tu prima del campo… A propósito, yo ya le he comentado a RIVALDESUERTUDA que tenías una prima en el campo que querías presentarme, sólo para despertarle suma curiosidad… Y podríamos enseñarle a bailar, a caminar con propiedad y todo eso. La llevaremos a casa del tío CACHONDO mientras RIVALDESUERTUDA esté fuera…
AMIGO estaba consternado.
—Robará la vajilla de plata y copulará con los criados.
CABEZOTA observó con interés cómo un intenso color encendía las mejillas de SUERTUDA y cómo volteaba la cabeza rápidamente y la garganta se le movía al tragar saliva. De modo que entiende lo que es «copular», ¿eh?

pues ahora ya me perdí del todo; creo q no lo leí

Yo no lo he leido, pero lo de "robará la vajilla de plata y copulará con los criados"...me ha matao... Chicas... ¿jugamos? - Página 24 519167

Ay que bueno ... Chicas... ¿jugamos? - Página 24 519167

Ness escribió:: Yo no lo he leido, pero lo de "robará la vajilla de plata y copulará con los criados"...me ha matao...

Ay que bueno ...

a mi tampoco me suena pero :jajaja:

Un poco más.. Wink

Algo me dice que sí lo habéis leído.. Pensar

MAYORDOMO miró asombrado al ver los pies descalzos y sucios de las muchachas.
—Y necesitaremos que traigan dos bañaderas de inmediato, MAYORDOMO.
El criado abrió la boca; parecía tentado de responder, Dios santo, obviamente que sí. Pero en cambio dijo:
—Muy bien, señor. Hablaré con la señora AMADELLAVES.
—Y también necesitaremos algo de ropa, MAYORDOMO. Algo para la señorita SUERTUDA y algo para la señorita HERMANADESUERTUDA, también. Hubo un… eh… accidente con el coche. Y desafortunadamente, su equipaje completo quedó destruido junto con sus prendas.
MAYORDOMO ni siquiera parpadeó.
—Eso sí que es desafortunado, señor. De todos modos me alegra que las dos jóvenes estén sanas y salvas. La señora AMADELLAVES se encargará de conseguir ropa de mujer.
—Eres una maravilla, MAYORODOMO. Gracias. Una cosa más: la señora AMADELLAVES cuenta la vajilla de plata todas las noches, ¿verdad? ¿Y la guarda bien bajo llave?
CABEZOTA prácticamente sintió el calor de la mirada encolerizada de la señorita SUERTUDA.
El criado frunció el ceño muy levemente.
—Sí, señor. Por supuesto.
—Muy bien, MAYORDOMO. Puedes retirarte.
Este giró sobre sus talones y comenzó a alejarse.
—Pero SUERTUDA, yo nunca he tomado un baño —susurró HERMANA.
MAYORODOMO aminoró el paso de modo casi imperceptible, como si las palabras de HERMANA hubieran impactado en medio de sus omóplatos. CABEZOTA contuvo una risa. Cualquier otro hombre habría trastabillado pasmado.

jajajaa ni idea pero parece divertido

Pues yo no recuerdo haber leído algo así nunca Chicas... ¿jugamos? - Página 24 232426

Eso sí parece más que divertido Chicas... ¿jugamos? - Página 24 519167

pondré un trocito de como se conocieron los protas.. Wink

CABEZOTA no podría decir qué fue lo que le hizo darse la vuelta en ese preciso instante. Tal vez fue el mismo instinto que le había permitido esquivar mosquetes en Waterloo y regresar a casa intacto. Pero eso fue lo que hizo.Y así fue como vio a la muchacha justo cuando estaba deslizando una mano en el bolsillo de su capa. CABEZOTA le aferró la muñeca. Petrificados y respirando con dificultad, se mirarona los ojos.
Rápidamente le causó impresión. La muñeca, delgada como la de una niña, la piel sedosa hasta el extremo, el pulso acelerado del terror bajo su pulgar. Una frente prominente y clara, luminosa bajo el sol de la tarde, una boca rosada casi en forma de corazón, un par de extraordinarios ojos color aguamarina encendidos de pánico e indignación. Y pecas, una diminuta colección de una lluvia dorada sobre la nariz.
Casi de manera inconsciente, él comenzó a contarlas. Una, dos, tres, cuatro…
—¡Uf!
CABEZOTA cayó de rodillas, jadeando por recuperar el aliento. Mientras él contaba sus pecas, ella le había dado un rodillazo en la entrepierna con brutal precisión. Y se fue, la multitud se la había tragado como si no hubiese sido más que una sombra.

Otra pista...el es abogado.. Cool

yo no lo he leido... pero xd!! adivinadlo,parece

Puede ser Amar a una Ladrona de Julir Anne Long Chicas... ¿jugamos? - Página 24 682317

Fantástica escribió:: Puede ser Amar a una Ladrona de Julir Anne Long

Muy bien fantastica !! Campeón

Te toca!!

Una vez más, la investigación al poder!!! Chicas... ¿jugamos? - Página 24 309406

Busco y pongo nuevo fragmento!! Chicas... ¿jugamos? - Página 24 253913

pricesa escribió:

Fantástica escribió:: Puede ser Amar a una Ladrona de Julir Anne Long

Muy bien fantastica !! Chicas... ¿jugamos? - Página 24 62184

Te toca!!

sabía

que

me sonaba

lo de

la gargantilla Chicas... ¿jugamos? - Página 24 520728

A ver, ahí va:

—¿Estás ligando con mi esposa, AMIGO?
—¿Y qué pasa si es así?
MACIZO se echó a reír.
—Tengo que enseñarte a hacerlo bien. Ese intento fue de lo más patético.
AMIGO le devolvió la sonrisa.
—No era un intento —volvió a mirar a MUJER—. Debería verme cuando lo intento.
MUJER no tenía muchas ganas de verlo. Demasiado peligro para ella.
MACIZO la atrajo hacia sí y ella lo miró de reojo. Trató de apoyar todo el peso en el pie derecho, pero una punzada de dolor le hizo arrugar el entrecejo. AMIGO la miró con atención.
—¿Estás herida? —preguntó BUENAZA.
MACIZO se apresuró a contestar. Deslizó las manos por detrás de sus rodillas.
—Tiene los pies destrozados.
—¿Por qué? —preguntó AMIGO, extrañado.
MACIZO la tomó en brazos.
—Por correr descalza.
—¿Y por qué corría? —preguntó BUENAZA.
MUJER le rodeó el cuello con los brazos y escondió la cara contra su pecho.
—Porque la asusté.
Eso no era lo que ella esperaba que dijera.
—¿Y por qué hiciste eso? —preguntó AMIGO.
—Ha pasado tanto tiempo desde la última vez que traté con una mujer decente que creo que perdí la cabeza.
—Ajá.
AMIGO no se creyó aquello, pero a MUJER no le importaba. Ella quería creerlo.
—A menos que tengamos otra cosa de que hablar, voy a llevarla dentro.

mi no tener ni iedea Rodar ojos

no me suena... Chicas... ¿jugamos? - Página 24 232426

Os pongo un trocito más...

—He estado pensando en lo que me dijiste.
—¿Y?
Como siempre, bebió el agua en pequeños sorbos.
—Creo que vas a tener que adaptarte al marido que tienes.
—¿Por qué?
MACIZO se sentó sobre la mesa.
—Porque tienes un efecto muy fuerte sobre mí, y ya soy demasiado mayor como para esconderlo. Ya no soy un crío que fisgonea tras la puerta de un burdel.
—Pero yo soy tu esposa.
—Y teniendo en cuenta que eres la mujer con la que voy a pasar los próximos cincuenta años, no veo donde está el problema.
—A mí no me importa.
—¿Qué?
—Que sientas lo mismo con otra mujeres —le dijo, agitando la mano.
MACIZO se echó a reír.
—Ya lo creo que sí. Te volverías loca de rabia. Afortunadamente, a mí no me criaron de esa forma. Juntos hasta que la muerte nos separe.
MUJER asió la taza de hojalata con manos de hierro y los nudillos se le pusieron blancos.
—Pero ésas son las parejas que se quieren. Entre nosotros no hay ilusiones.
—Tan sólo las que han surgido de imaginaciones tuyas.
Los ojos de MUJER relampaguearon.
—¿Y cuáles son?
—Las que dicen que voy a decepcionarte.
—Yo nunca he dicho eso —bebió un sorbo de agua—. Yo no tengo ninguna expectativa sobre ti.
—Vas a tener que compensarme por esa mentira.
—No es mentira. No espero nada de ti en absoluto
MACIZO le rozó los labios con el dedo pulgar.
—Esperas que me eche encima de ti como una fiera hambrienta. Esperas que te eche en cara tu pasado cada vez que me acerco. Esperas que lo use para herirte y humillarte en cuanto bajes la guardia.
MACIZO deslizó la punta del dedo por la mejilla de la joven.
—Eso no va a pasar, MUJER.
—Tonterías.
—Es cosa mía demostrarlo, pero también necesito que me des una oportunidad.
MUJER echó la cabeza hacia atrás, desafiante.
—¿Entonces las cosas serán más fáciles para ti?
—Yo esperaba que fueran más fáciles para ti.
—Supongo.
MACIZO soltó el aliento.
—Veo que estás cerrada a nuevas ideas.
MUJER no respondió. No era necesario.
—Éste es el trato. No tengo por costumbre andarme con rodeos. Eres preciosa y no puedo resistirme a ti. Antes te deseaba. Te deseo ahora. Y te desearé después. No me enseñaron cómo darle placer a una esposa, pero no creo que sea una falta de respeto hacerte saber lo mucho que te deseo. Soy así, y por lo menos conmigo siempre sabrás por dónde van los tiros.
—¿Aunque no me guste?
—Es cosa mía hacer que te guste.
—Eso no es justo.
Él se encogió de hombros.
—La vida no suele serlo, pero lo cierto es que nada de lo que hagamos estará mal, así que cuando te pida algo, tenlo muy presente.
—¿Y qué pasa con lo que yo quiero?
—No hay nada que no quisiera darte en la cama. Sólo dime qué quieres y lo tendrás.
—Quiero estar sola.
La sentencia flotó en el aire durante unos segundos.
—Excepto eso.