Abigail además de ser la hija del editor y dueño de un periódico, quiere ser periodista y demostrarle a su padre que es capaz de hacer un buen trabajo. Hasta ahora sólo ha publicado pequeños artículos bajo el anonimato y a
escondidas porque sabe que su familia porque sabe que no no lo aprobarían ya que quieren que desempeñe el papel tradicional de la mujer de ama de casa, madre y esposa, pero ella no se deja convencer y en cuanto descubre que el periódico tiene serios problemas financieros decide ponerles remedio con la publicación de un artículo con una noticia sensacionalista que consiga aumentar las ventas y soluciones los problemas financieros del periódico que de otro modo está destinado a la quiebra.


Decidida como sea a conseguir un suculento artículo de una de las familias más importantes y escandalosas de
Londres, acepta la invitación de su amiga Gwen para asistir a una fiesta campestre que se da en honor de Elizabeth, la hermana del duque de Madingley, uno de los solteros más deseados, para poder obtener información sobre el pasado del duque, que según Gwen se rumorea que oculta un gran secreto del que nadie parece conocer nada, haciendose pasar por una dama de la alta sociedad y ocultando su condición de plebeya hija del dueño de un periódico.

Una vez en la casa de campo del duque donde se desarrolla la casi totalidad de la historia, las miradas cómplices y la atracción que existe entre el duque y Abigail se produce desde el primer momento en que se ven, y aprovechando que el duque quiere permanecer alejado de las posibles novias que su madre a llevado a la fiesta Abigail le propone aparentar que él está interesado en ella y así alejar a las demás candidatas a futuras duquesas, con la intención de obtener información para el artículo.

Y así, ayudada por las situaciones que se producen poco a poco entre ambos protagonistas van enamorándose sin darse cuenta y tratan de descubrir los secretos que cada uno de ellos esconde, lo que le da un toque de
misterio a la historia que te hace leer con ganas de saber un poco más, sobre todo del misterioso pasado del duque que con tanto empeño quiere ocultar a toda costa.

Entretenida historia que te hace pasar un rato agradable, donde Abigail demuestra ser un personaje independiente y atrevido para su época, mientras que Christopher, un hombre que no cree poder encontrar el amor y que intenta hacer lo correcto, cumplir con su deber y hacer frente a sus obligaciones como duque, se tiene que enfrentar a su pasado.