En este libro nos adentramos mucho más en el mundo de los ángeles caídos; descubrimos qué son las sombras, cómo utilizarlas, y qué papel desempeña Luce en todo esto.
Además, los profesores que la instruyen en el nuevo colegio, son dos ángeles caídos, cada uno de un bando, algo que ayudará a entender más toda esta historia.
El libro empieza donde acabó el otro, en la tregua proclamada por Daniel y Cam de 18 días, antes de que estalle la gran batalla. Luce es enviada a la escuela de la costa, una escuela elitista donde conviven nefilim y humanos, sólo que estos últimos no saben que son dos razas distintas.
En un primer momento no le atrae mucho este cambio. Además, Daniel le ha dejado claro que no puede estar allí con ella, ya que la está protegiendo desde el exterior de la escuela, pero a poco a poco, va conociendo a gente y se va adaptando. Incluso puede que descubra que puede tener otra clase de amor, que no hará que estalle como una antorcha humana.
Lo que me gusta de esta protagonista, es que no es de las que se quedan en un rincón llorando, y haciendo caso a todo lo que le dicen, así que cuando Daniel le prohíbe algo, ella no tarda en hacerlo y, la verdad, si la pobre no lo hiciera así no se enteraría de nada, ya que él, por miedo a que desaparezca, no le cuenta nada de nada, cosa que hará que en más de un momento ella tergiverse las situaciones.
Daniel, sin embargo, cada vez es más obtuso. Yo entiendo que el quid de una saga es mantener el misterio para que sigas enganchado, pero tanto misterio, sin muchas aclaraciones, me pone de los nervios, y el hecho de que sólo porque él diga que la quiere, ella tenga que aceptarlo todo sin rechistar, es una actitud que me pone atacada, menos mal que, como he dicho antes, ella no le hace ni caso, que sino.....
Los nuevos personajes secundarios, son un plus a la historia, dan mucho juego, y con ellos veremos la otra cara de los ángeles caídos.
En conclusión, quien dice que segundas partes no fueron buenas, no puede decirlo de este libro; sigue enganchando tanto o más que el primero, además tiene un final que te dan ganas de sacar los pompones y corear a la prota. Así pues, no tengo mas remedio que leer el tercero :)