Ebony nos ha enviado una sinopsis más extensa de su libro y además, ha enviado un archivo con parte del libro (digo parte, porque no es el primer capítulo, es bastante más).
Os lo dejo aquí:
SINOPSIS
Para Amanda Abbot la vida no había sido un camino de rosas. Se había convertido en la actriz principal de un famoso culebrón de la BBC, su carrera pasaba por su mejor momento, los hombres la deseaban y las mujeres envidiaban la vida de glamour y fantasía que ella vivía. Desconocían que cuando las luces del plató de grabación se apagaban, la risa era fingida, las lágrimas no sabían a sal y en los besos no había amor. Todo aquello que otras mujeres anhelaban, formaba parte de un producto televisivo llamado Lori Chase que era ella misma. Pero Amanda odiaba todo cuanto ese estilo de vida representaba. Deseaba pasar una noche en el sofá con sus pantuflas preferidas, comiendo palomitas y disfrutando de una buena película, abrazada a alguien que quisiera estar con Amanda, la mujer de carne y hueso. Echaba de menos una Navidad junto al árbol, el que ella y su hermana decoraban entre gritos cuando eran pequeñas. Echaba de menos todas las pequeñas cosas que no tenía desde que se había convertido en Lori Chase, la superestrella de la serie de mayor audiencia de la BBC. Cuando su amiga Kitty le hizo aquel extraño regalo, no lo dudó un segundo y se subió a aquel avión, dejando atrás un Londres lluvioso, un apartamento frío y un compañero de reparto que, lejos de ser su príncipe azul, había demostrado ser un sapo repugnante y mentiroso. Al pisar por primera vez Harmony Rock, Amanda tuvo dos revelaciones. La primera era que en aquel lugar Lori Chase no podría atraparla nuevamente. La segunda, que existía una especie de sapo diferente a los que había conocido. Uno peligrosamente atractivo, inmune a sus encantos y que contra todo pronóstico, en lugar de intentar meterla en su cama, pretendía mantenerla alejado de ella y de todo el estado de Texas.
La familia McKenzie se había forjado a sí misma. En una tierra en mitad de la nada, los patriarcas Abraham y Flora McKenzie habían construido un hogar que se había sostenido durante cinco décadas sobre los valores que habían inculcado a cada uno de sus hijos: amor, familia, amistad, coraje, respeto y honor. Los cuatro hermanos McKenzie, Brooke – la única chica – y los atractivos Tyler, Cameron y Dylan, formaban un equipo magnífico. Tras la muerte de Abraham, Tyler McKenzie se había convertido en el nuevo cabeza de familia. Su enorme sentido de la responsabilidad, los problemas económicos en el rancho y algún desengaño amoroso, comenzaban a transformarle en un tipo hostil y huraño que había olvidado como divertirse. La llegada a sus vidas de una mujer como Amanda Abbot no auguraba nada bueno. Ella era hermosa y delicada, su piel olía a romero y su sonrisa era capaz de derretir el hielo.
Tenía todos aquellos trapitos caros comprados en Harrod’s que iba regalando a Brooke, alimentando sus fantasías de adolescente y haciendo que el clan de hermanos casi al completo la colocara en un pedestal. Aunque él conocía bien a las mujeres como ella, que se iban metiendo debajo de la piel día a día, enredándole, torturándole con aquel suave acento británico que le erizaba la piel aunque jamás lo reconocería. El pueblo entero adoraba a aquella encantadora turista inglesa. En realidad, ella era todo lo que un hombre que no tuviera miedo a amar podría desear.
Pero no era uno de ellos. Las mujeres como Amanda no echaban raíces en lugares como Harmony Rock, donde no había tiendas para gastar sus libras ni restaurantes con nombres rimbombantes para salir a cenar. Tyler tenía que buscar el modo de deshacerse de Amanda, antes de que todo el maldito pueblo decidiera adoptarla para siempre. Antes de que fuera demasiado tarde y se enamorara perdidamente de ella.