Era el día. Susan Elizabeth Phillips presentaba su libro en Barcelona. Y, para celebrar tan esperada visita, se reunió con un grupo de bloggers entre los que yo me contaba —también contó con la presencia de nuestra querida Pepa—. Esto fue posible gracias a las chicas de B'Radic —Be Romantic Addict— y de Ediciones B en una organización impecable.

Y allí estábamos, en el emblemático hotel Casa Fuster. Qué mejor lugar para un encuentro sobre novela romántica que la antigua vivienda de los Fuster ahora convertida en hotel, el regalo que le hizo Mariano Fuster i Fuster a su esposa, la que fue la casa más cara de la ciudad en su momento, un precioso edifico modernista.

El encuentro fue realmente agradable y divertido, en el Café Vienés tuvo lugar esta irrepetible reunión, donde SEP y su traductora escucharon nuestras preguntas sobre su último libro, «Los héroes son mi debilidad», sobre otras de sus obras y sobre ella misma. Pero SEP conoce este mundo y se nota, tiene tablas y un gran sentido del humor, algo que demostró con creces, incluso acabó haciéndonos preguntas ella a nosotras, interesándose por las autoras y subgéneros románticos que más se leen en España.

Así, allí sentadas en cómodos sofás, nos turnamos para hacer nuestras preguntas. Y así nos enteramos de cosas como...

...que la ambientación de la novela esta inspirada por la mansión Manderley de «Rebecca» —seguro que Annie también soñó que volvía a Manderley— y sus personajes son «una versión más sexy» de novelas góticas como «Jane Eyre» de Charlotte Brontë o la mencionada «Rebecca» de Daphne du Maurier.

...que a pesar de haber afirmado que los Chicago Star eran una serie acabada porque no tenía nada más que contar sobre los chicos de este equipo, está escribiendo una nueva novela sobre ellos pero, por más que insistimos, no quiso desvelar los nombres de los protagonistas.

...que no le gusta «Cumbres Borrascosas» de Emily Brontë porque tiene un aura demasiado deprimente.

...que su novela favorita siempre es la que acaba de terminar y la menos favorita la que está escribiendo en ese momento.

...que durante su tour por Alemania, antes de llegar a España, coincidió en el aeropuerdo con Diana Gabaldón.

Un punto más a su favor porque adoro «Rebecca» —la película, por una vez la adaptación supera a la novela original— y me deprime «Cumbres borrascosas».

Además, nos explicó que en Estados Unidos están empezando a estudiarse las novelas románticas en las universidades, y nos contó, orgullosa, que dos de sus novelas, «Nacida para seducir» y «Ella es tan dulce» se contaban entre las obras estudiadas. También opinó sobre el feminismo en el género, pues cree que las novelas románicas deben ser feministas y mostrar el camino metafórico de la heroína hacia su evolución para encontrase a sí misma, porque el protagonista siempre parte desde un punto de partida con ventaja.

Sobre su metodología me llamó la atención que escribe tres horas al día y usa un temporizador. Cada vez que hace una pausa para el tiempo y a veces esas tres horas le duran hasta la noche.

Tras cinco minutos de charla ya nos había demostrado su buen carácter, sentido del humor y respeto hacia sus lectores. Puedo decir que no esperaba que una autora tan conocida y valorada resultara ser tan cercana, atenta y divertida y en aquellos sofás se oyeron más de una carcajada.

Después nos firmó los libros que llevamos y nos hicimos fotografías individuales y en grupo con ella.

Después de este singular encuentro nos dirigimos a la Casa del libro, situada en la misma calle, un breve trayecto en el cual SEP pudo disfrutar de la visión de La Pedrera, el edificio diseñado por Gaudí, pues nos comentó que no había tenido tiempo de ver casi nada. Pero al llegar a la librería le esperaban monumentos de otro tipo: allí se encontró con el recibimiento de sus propios Chicago Star —que eran jugadores verdad, de los Badalona Dracs— que le hicieron el pasillo de bienvenida y se fotografiaron con ella. Y os aseguro que era como ver a un niño recibiendo su regalo de Navidad, se la vio gratamente sorprendida.

Entonces tuvo lugar la presentación en un local repleto, no quedó ni una silla libre, y allí todas las chicas y chicos —que también los había— presentes pudieron transmitirle sus preguntas. Pero antes de nada, SEP nos hizo un juego para ponernos a prueba, nos daba la característica del protagonista de una de sus novelas y teníamos que acertar el libro. Y, tras esta charla, firmó más libros y se fotografió con asistentes que querían un recuerdo de esta irrepetible visita.

Ahora puedo decir que la visita fue un éxito, además hay que tener en cuenta que era día de partido de liga, y había dos importantes. Lo dice una fan del fútbol que también eligió conocer a SEP.

Por último, decir que después de haber leído el libro, lo recomiendo. Es cierto que otros libros suyos me han gustado más (ejemBesarAUnÁngelyLoQueHicePorAmorEjem), y otros me han gustado menos, pero la ambientación y el personaje masculino aportan algo especial en esta historia. Es posible que se deba a la influencia de la «Rebecca» y la Manderley de Hitchcock —ya he dicho que es una de esas raras ocasiones en las que la película supera al libro, y el Maestro del Suspense nos brindó una Cenicienta gótica memorable—, pero son elementos que me han encantado. También lo ha hecho la trama de suspense que acompaña a la historia de amor.

Gracias a Susan Elizabeth Phiilips por mostrarnos su simpatía y buen humor.

Y gracias a la gente que hizo esto posible: las chicas de B'radic y a Vergara, que también estuvieron presentes.

Fue una tarde memorable.

MaryJane, Barcelona.