Antes de nada debo aclarar que de la antología “A stockingful of joy” sólo he leído el relato “The Best husband money can buy”, o lo que es lo mismo “El mejor marido que el dinero puede comprar”, de Mary Jo Putney. De modo que imparcialmente las 5 estrellas van única y exclusivamente para éste relato porque no puedo opinar por lo otros.

En éstas muy señaladas fechas, siempre me gusta leerme algo especial, y llevaba tiempo reservando relatos cortos para leerme en Navidad, éste relato de Mary Jo Putney fue uno de los elegidos hace tiempo, y debo decir que me ha encantado.

“The best husband money can buy” es una breve historia de apenas 100 páginas que puede leerse en una tarde. Lo que más me ha gustado es que pese a su brevedad, tiene los mejores toques de su autora, unos personajes fuertes y atractivos que son capaces de enamorar siendo como son, y una historia, que aunque corta, es muy sólida y bonita.

Lo mejor, la explicación que Mary Jo Putney da sobre la historia; que la basó en una historia real que leyó. En éste relato, lo que la autora nos cuenta es un romance en la extensísima y aristocrática familia Vaughan. Emma y Anthony son primos lejanos, y se conocían de las reuniones familiares que los Vaughan daban en su castillo para Navidad. Aún siendo muy niña por aquél entonces, Emma estaba enamorada de Anthony, pero él no era para ella.

Tras perder trágicamente a sus padres, Emma se quedó sola y sin dinero, y hubo de ponerse a trabajar como institutriz; éste incidente hizo que Emma, por orgullo, no volviera a aceptar una invitación de Navidad por parte de la duquesa viuda. Semanas antes de Navidad, a Emma le cambia la suerte, ha heredado una fabulosa suma de dinero, y gracias a ella puede dejar su vida como institutriz; pero Emma es una mujer práctica, sabe que no es hermosa, y aún así no quiere privarse de la felicidad que puede darle estar casada y tener su propia familia, así que ¿Por qué no conseguirse al mejor marido que el dinero puede comprar?

El título le viene que ni pintado, porque el marido en el que Emma piensa es en su primo Anthony, al descubrir que al final no se casó con la hermosa prima Cecilia. Anthony tiene un título y unas tierras, y sólo eso, porque está a punto de perder su casa tras la ruina económica que dejó el jugador de su padre. Así que, cuando Emma entra en su vida para proponerle un matrimonio concertado, a cambio de que pueda recuperar su hogar, Anthony no se niega.

Lo que en principio parece un simple matrimonio de conveniencia, pronto se dará cuenta el lector de que hay mucho más detrás. Emma no espera que Anthony la ame, pero lo será por las fechas, o porque tienen pensado volver juntos a la fiesta de Navidad de la familia Vaughan, pero lo cierto es que el romance no tardará en florecer entre los muros del castillo.

Sí, breve, corto y conciso, pero me ha encantado la historia y sus protagonistas, así que ha quedado como un bonito relato para leer durante navidades.