Lady Felicity y el canalla – Sarah MacLean


Sinopsis

Un canalla entra en escena…

Cuando un misterioso desconocido se cuela en la habitación de lady Felicity Faircloth y le ofrece su ayuda para que consiga pescar a un duque, ella acepta con una sola condición: en su matrimonio no puede faltar la pasión.

Lady Felicity hace un pacto peligroso…

Hijo bastardo de un duque y rey de las calles oscuras de Londres, Diablo se ha pasado toda la vida haciendo uso de su poder y sacando provecho de todas las oportunidades que se le presentan; y esa solterona es lo que le hace falta para poder llevar a cabo su venganza. Lo único que precisa es convertirla en una mujer irresistible, tender una trampa a su enemigo y destruirlo.

Por la promesa de la pasión...

Pero cuando se trata de Felicity Faircloth, las cosas son blancas o negras, y ella enseguida decide que prefiere un diablo a un duque. Así que, los planes que Diablo ha trazado tan cuidadosamente se convierten en un caos, y él se verá obligado a elegir entre todo lo que siempre ha querido... y lo único que siempre ha deseado.


Valoración

Ya podemos decir que Sarah MacLean es la escritora que tiene fijación con los canallas.

Yo tengo un problema con ella y es que tiene una trayectoria tirando a irregular. Es decir, es capaz de sorprender con historias frescas como Nueve reglas que romper para conquistar a un granuja o Un canalla que no lo era, para después presentar novelas más bien aburridas que incluso me ha costado terminar, o que directamente se han quedado a medias como Diez lecciones para dar caza a un lord... y que te adore o Un escocés en la oscuridad.

Pero como es de la pocas autoras ―o prácticamente la única― de novela romántica histórica a la que siguen publicando con ―por el momento― fidelidad, la sigo leyendo esperando encontrar una de sus novelas buenas.

En esta novela nos presenta el inicio de una nueva serie ―relacionada con la de «Escándalos y canallas»―, pero la historia no ha acabado de cuajar. La sinopsis es bastante típica, nada original, pero es un buen punto de partida para el desarrollo posterior. Lo que ocurre es que le falta profundidad a la trama, es como si hubieran plantado allí a los protagonistas con un guión, pero con una vida difusa y sin matizar.

Hay muchas cosas que no llegan a quedar claras, como la afición secreta de Felicity. ¿Quién le enseñó? ¿Cómo? ¿Por qué? Eso rechina bastante, no es sólo que sea poco creíble, es que no presentan ningún motivo u objetivo para ello. Lo que me ha gustado de Felicity es que deja de interesarle Mayfair y su gente cuando se siente atraída por Covent Garden, no que acepte los suburbios por estar con Diablo, sino que sus calles ejercen atracción sobre ella.

En cuanto a Diablo ―y su común apodo―, su pasado no queda del todo claro y le resta personalidad y presencia al personaje, por ejemplo con el paso de niño asustado a rey de los suburbios del que se dan algunos detalles nada más.

La afición de Felicity la puedo entender como algo para tranquilizarse, como quién hace un puzzle. Pero lo poco que se detalla de las vidas de los dos cuando no están «en escena» y el pasado desdibujado de Diablo los veo como fallos de la narración. Seguramente la relación de los hermanos y el antiguo duque se toque más adelante, pero en lugar de crear intriga me ha dejado a medias.

Entrando en el argumento, el famoso plan, que es el punto de partida de la historia, me parece bastante absurdo y poco congruente, más de lo que parece indicar la sinopsis. Eso lo habría podido pasar por alto si no fuera por el tema narrativo, que me ha desconectado un poco.

Entre Felicity y Diablo/Devon hay química y lo mejor son las escenas entre ellos, pero el resto de la historia no se concreta.

La presentación del resto de personajes tampoco me ha dicho mucho. Bestia tiene su carisma, pero el duque es bastante desagradable y ahora mismo ni su historia ni sus justificaciones me despiertan ningún interés.

Una novela que no entra en el grupo de las mejores lecturas ni de las peores de la autora, es una historia que me ha dejado un poco indiferente pero que es entretenida y por ello se lee rápido.