4 Estrellitas. ¿Por dónde empiezo? Si pensabais que Ward no podía meter más giros argumentales os equivocabais. Las últimas 100 páginas de éste libro han sido una tras otra, un carrusel de sube y bajas que me han llevado desde la desesperación más absoluta, hasta la mayor excitación.

Con "Lassiter", J. R. Ward cierra un ciclo de la Hermandad para abrir otro, y es que en éste libro ocurren muchas, muchísimas cosas como para asimilarlas todas.

Tras un principio de novela, poco o nada favorable, aburrido, donde no ocurría nada, o donde lo poco que ocurre es tan introductorio que no es interesante, Ward se ha dejado lo mejor para el final.

No quiero desvelar nada, así que espero que si estáis leyendo esta crítica hayáis llegado hasta "Lover Arisen", porque si no, os destripo todo.

En "Lassiter" tenemos la historia de nuestro ángel favorito, ése que era un payaso sin sentido del ridículo y con un gusto televisivo deplorable (en palabras de Vishous). En esta su historia, no veremos al Lassiter de los anteriores libros, conoceremos al ángel, aquel que tiene una gran responsabilidad sobre sus hombros como el protector de la raza de vampiros, y sobre todo de sus amigos, la Hermandad, a los que tiene como su familia, y su gran sentido del sacrificio hacia ellos.

En éste libro tendremos de nuevo una amenaza muy peligrosa y real para los vampiros y la Hermandad. La demonio Devina, mediante los hechizos del Libro, ha conseguido invocar a quien realmente es su amor verdadero, Lash, el hijo del Omega. De esta manera veremos a Lash resucitado y con el poder de su padre, capaz de restablecer a la Sociedad Restrictora. La peligrosidad de Lash realmente es apabullante, pues ya acabó con la glymera, y conoce la manera de luchar de la Hermandad, al haber sido entrenado por ellos.

Pero el personaje que traerá mayor luz y esperanza a esta historia es Ravhyn, la prima de Savhage, esa misteriosa mujer vampiro que nadie sabe cómo viajó en el tiempo hasta nuestro mundo, ni cuales son sus poderes, capaces de curar la vida y muchos milagros similares. Desde que Lassiter conoció a Ravhyn, supo que ella sería su pareja predestinada, pero lo suyo no puede ser, debido a la implicación de Lassiter como protector de la raza.

Además, Lassiter tampoco puede quedarse en nuestro mundo. Aparte de Devina, Ward nos ha vuelto a mezclar a la Hermandad con la infructuosa serie de los Ángeles Caídos, trayéndonos a los ángeles Eddie y Adrian, mensajeron del Creador, que han venido para llevarse a Lassiter de vuelta.

En éste conglomerado de cosas, veremos otra vez a los Hermanos luchando contra los Restrictores, y a Lassiter enamorándose de Ravhyn. ¿Me ha gustado el romance? En el fondo sí, no ha sido muy memorable y la Ward tampoco se ha centrado mucho en ellos como protagonistas. Hay ciertos puntos de tensión, pero realmente he pensado que los protagonistas tenían que haber hablado más, o tener mayor protagonismo. La pena es que la Ward ha desaprovechado muchos puntos calientes, como la implicación de Nate, que tan enamorado estaba de Ravhyn.

Pero sin duda lo más emocionante es el final. Ése final que no he podido imaginarme o creerme, porque sinceramente mi cabeza no podía procesarlo, no quería creer que lo que estaba leyendo era cierto, y aunque ese epílogo explica algo, me ha dejado con más interrogantes todavía. Sí, ocurre algo muy, muy fuerte que desestabiliza todo lo que la Hermandad era.

Sabiendo como sabemos ahora, que el siguiente libro será la historia de Nalla y Wrathcito, puedo asimilar más el final de éste libro o arco narrativo. ¿Era necesario? En el fondo creo que sí, la Ward estaba muy estancada en los últimos libros y la trama necesitaba un gran giro para comenzar de nuevo, y éste salto en el tiempo para conocer nuevas amenazas o los romances de los hijos de los Hermanos, así como de otros personajes que aún no se habían emparejado, eran necesarios.

Solo espero que de verdad este salto en el tiempo haya merecido la pena, y la Ward lo explique todo sin medias tintas, porque vaya jamacucos me estaba causando éste libro. "Lassiter" como novela, me ha gustado, pero no me ha encantado. El principio me ha parecido un rollo, solo reforzado por la segunda mitad del libro, y el romance no ha sido de los mejores de la serie. Pero como siempre y desde que ésta autora me introdujo en la novela romántica, los Hermanos son y serán mi droga y seguiré leyéndolos.

De verdad que no puedo asimilar lo que ha escrito ¿Cómo ha sido capaz?

Eso no se hace:

Me he desahogado   necesitaba contarlo.