Jessica Ford es una joven abogada que trabaja en un bufete de alto nivel de Washington. Su jefe, amigo de la primera dama Annette Cooper, le encarga que vaya al encuentro de ésta, que se encuentra en un bar a escondidas del Servicio Secreto.

Todo lo que Jessica recuerda es verse, sin saber por qué, en el asiento trasero de un coche que vuela por las calles desiertas en plena noche. También recuerda que hubo un accidente, y que los otros tres ocupantes, incluida la primera dama, están muertos. Malherida, Jess es la única superviviente de lo que la prensa define como un «trágico accidente».

Perseguida es el título de esta novela de Karen Robards de suspense romántico donde el protagonista, Mark Ryan, jefe del servicio secreto a cargo de la seguridad de la primera dama de EE.UU. recibi la noticia, nada más finalizar su turno, de que ésta ha muerto en un extraño accidente después de desaparecer de la Casa Blanca donde en teoría debía encontrase tranquilamente durmiendo.
Como jefe del equipo de vigilancia se siente culpable, ha fallado, ha hecho mal su trabajo y como consecuencia ha muerto la persona a la que tenía que proteger, todas las miradas y preguntas van dirigidas a él, pero no tiene respuestas. Sólo ha logrado sobrevivir al accidente una mujer de la que no sabe nada, y de la que poco a poco va averiguando quién es y qué hacía allí, a la vez que se van desvelando misterios ocultos sobre la mujer del presidente que pueden hacer peligrar su posición política.

Por su parte, la abogada Jessica Ford, se ve envuelta sin pretenderlo en medio de un extraño accidente que dará un vuelco inesperado a toda su vida.
De repente pasa de estar haciendo un trabajo por encargo de su jefe a encontrarse en un hospital recuperándose de sus heridas, nada más despertarse de los efectos de los tranquilizantes ve como alguien intenta asesinarla inyectándole un líquido en la intravenosa que tiene puesta, después de lograr salir viva de ese enfrentamiento comienza a recordar el accidente y se da cuenta de que algo no encaja. En esos momentos Jess se replantea su vida y comienza a ver la vida de otra forma al darse cuenta de que ha estado a punto de morir, y mientras tanto, se nos presenta con detalle a la madre y a las hermanas de Jess y a algunos otros secundarios, lo que hace algo lento el desarrollo del libro, y nos aleja un poco de la investigación y el misterio del caso que se narra, quedando descompensado la parte que se centra en comentarnos de la vida de Jess y de su familia, frente a lo poco que se nos dice sobre la vida privada de Mark del que apenas se habla en los primeros capítulos lo que hace que se pierda el ritmo que le da a un libro la trama de suspense y que el desarrollo de la investigación y la relación entre los protagonistas que apenas aparecen juntos y se dicen unas pocas palabras sea algo lenta.

Sin embargo, una vez pasados estos primeros capítulos el libro va mejorando cada vez más, y mientras Jess intenta escapar de las personas que quieren asesinarla y Mark entra en escena para intentar protegerla, la atracción que éste siente por Jess va en aumento conforme se van conociendo, a la vez que el enamoramiento que Jess sentía por Mark, al que conocía casualmente de vista antes del accidente, se consolida como algo más.

En definitiva, un libro recomendable para pasar un rato entretenido si te gusta el suspense, donde una vez superados los primeros capítulos introductorios que son algo más tediosos, se entra de lleno en la trama de la investigación y la lectura se hace más amena y rápida, y en el que la historia romántica es más rápida aún, ya que una vez que se conocen la relación entre los protagonistas transcurre en unos pocos días, lo que hace que no se nos transmita la sensación de que entre ellos exista un gran amor sino más bien una fuerte atracción, quedando la historia de amor como una añadido a la de suspense.

Le doy un 6.