De niñas lo compartieron todo. Con los años se han convertido en mujeres divertidas, sexis e independientes. Y han montado una empresa donde cada una pone lo mejor de sí misma para convertir una boda en el día perfecto. El éxito está asegurado si Parker se ocupa de la organización, Laurel del banquete, Emmaline de los arreglos florales y Mackensie de las fotos. Si alguien sabe cómo planear la mejor boda es este cuarteto de amigas. Pero organizar varios enlaces a la semana no garantiza encontrar el amor, que siempre aparece cuando y donde menos lo esperas… como acaba de sucederle a Mackensie Elliot.

Mac siempre se ha sentido más cómoda detrás de la cámara, con la que capta esos instantes de felicidad en los que jamás ha creído. Hasta que literalmente tropieza con uno. De metro noventa. Y aunque sigue convencida de que las canciones de amor eterno no se escribieron para ella, ¿por qué no aceptar que a veces la vida nos depara sorpresas?

Pero lo que en realidad le pasa a Mac es que tiene miedo. Tiene terror a sentir, a creerse que quizás, sólo un poco, esa felicidad puede rozarla y destruirla del todo.

Mi crítica:

Primer libro de la serie Cuatro bodas.

Es una historia sencilla pero taaan bonita... Habla sobre la amistad y el amor. Primero sobre la amistad entre cuatro mujeres, amigas de la infancia, que son como una familia, que se complementan, que se apoyan en todo momento y montan su propia empresa sobre planificación de bodas, me ha gustado esa relación tan fuerte que tienen. Y también trata sobre el amor, que puede aparecer en cualquier parte y en cualquier momento, de la forma más inesperada, y es una historia de amor preciosa.

Además, mientras la relación de los protagonistas avanza van apareciendo diferentes bodas organizadas por las cuatro amigas y cada ceremonia es un mundo con sus peculiaridades.

Mac descubrió su vocación de fotógrafa muy pronto y por casualidad, eso la ayudó a sobrellevar crecer en un hogar desestructurado. Pero aún vive martirizada por su egoísta -no, egoísta no, lo siguiente- madre y sus chantajes emocionales, las vivencias de su infancia le impiden creer en el amor, en que la felicidad sea duradera y le tiene miedo al compromiso a pesar de dedicarse a fotografiar y capturar momentos felices. Es una chica amable y sincera casi siempre, cuando las discusiones con su madre no la dejan agotada, entonces acaba explotando por algún lado. Pero entonces aparece Carter para cambiarlo todo, un hombre al que piensa que empieza a conocer pero justo en ese momento la sorprende de nuevo.

Carter es profesor de literatura y estuvo enamorado de Mac en el instituto, parece un hombre serio y formal, un poco torpe, al que le gusta mantener una rutina pero... al parecer da unos besos para caerse de espaldas. Después de volver a su ciudad para dar clases en su antiguo instituto se reencuentra con su amor platónico de entonces, y Mac es todo un reto. Carter es tierno y adorable casi siempre, porque en ciertas situaciones se transforma y sale a la luz su lado salvaje. Quiero uno para mí.

A simple vista, parecen una pareja incompatible, sin nada en común, pero se complementan a la perfección. Se reencuentran por casualidad -en una escena sin desperdicio- y después de un beso que deja a Mac sin habla, siguen viéndose y enamorándose. Ella es muy apasionada con todo y él sabe escucharla, son exactamente lo que el otro necesita, la chispa que saltó con el primer beso va creciendo rápidamente.

Los secundarios son geniales, los que más destacan son las tres amigas y socias de Mac, en realidad es como si las chicas de Sexo en Nueva York se dedicaran al negocio de las bodas. Mac, Parker, Emma y Laurel se complementan perfectamente tanto en el plano laboral como en el personal, se lo cuentan todo y se apoyan incondicionalmente, tienen una relación muy bonita. También aparecen Del, el hermano de Parker, y su amigo Jack, y ya se presiente una futura historia entre Emma y Jack. También aparece la egocéntrica madre de Mac con sus caprichos de adolescente, y en contraposición la encantadora familia de Carter.

Un libro precioso y se lee rápido. Todos los personajes me han gustado, son muy diferentes entre ellos pero les une una gran amistad y la historia de amor es muy bonita, y me he divertido mucho con algunas escenas. Me gusta esta nueva serie de Nora Roberts, me ha sorprendido.