Tras la muerte del duque de Withsire, su hermana, Lady Nevon, puede por fin llamar a su lado al joven Bryce, el hijo bastardo del duque que ha vivido oculto al mundo. Durante años, Lady Nevon le ha protegido del odio de su padre y ha cuidado, desde la sombra, de que reciba una buena educación.

Bryce no quiere reconocimiento ni honores, pero su astuta tía lleva años planeando el encuentro, y tiene planes que Bryce aún no puede sospechar. Planes en los que tiene mucho que ver la joven Gaby, protegida de Lady Nevon desde la trágica muerte de sus padres.

Bryce no puede evitar sentirse atraído por aquella joven amable, sincera y generosa... pero antes de que su romance siga adelante, debe ayudarla a resolver el misterio que anida en la memoria de la muchacha, la clave sobre la fatídica noche en que su mundo se vino abajo.

Si esta novela tuviera banda sonora, sin duda seria una pieza de Beethoven de las que tanto le gustan a Gabrielle, mientras pasaba las páginas casi podía escuchar los acordes de "Para Elisa" y "Claro de luna", cada vez que la protagonista tocaba el piano.

En la historia se mezcla el romance con un suceso ocurrido trece años atrás, por una parte el romance entre Gabrielle y Bryce, y por la otra el momento en que Gaby perdió a sus padres, un momento tan terrible que su mente ha bloqueado el recuerdo, excepto algunos fragmentos. No es la típica historia que se desarrolla en los salones de baile, la mayor parte se desarrolla en la mansión de Nevon Manor, que va más con la personalidad de los protagonistas.

Bryce es un hombre de éxito que se ha hecho a si mismo, es uno de los abogados más importantes de Londres, pero todo lo que es se lo debe a su tía Hermione, que, en secreto, pagó su educación y le salvó la vida cuando fue repudiado por su padre y abandonado por su madre. Es un hombre noble que cree en la justicia, que sigue siempre las normas. Siente un gran sentimiento de lealtad hacia su tia y, aunque no quiere nada que provenga de su padre, no puede negarle ningún favor a Hermione, y ahora ella le reclama en su mansión. Allí conoce a Gaby, que le inspira sentimientos de protección y de una pasión que nunca había conocido.

Gaby es la protegida de Hermione desde los cinco años y apenas ha salido de su casa ni ha vuelto al lugar que le trae tan malos recuerdos. Ha estado muy protegida y por ello es una chica inocente y sincera, pero no ingenua, y es muy intuitiva e inteligente. Para ella lo más importante es la música.

Gaby y Bryce se sienten a gusto el uno con el otro porque ambos han tenido que superar un pasado difícil, y tienen en común su amor y agradecimiento por Hermione. Confían el uno en el otro y hablan sobre ese pasado del que no habían hablado con nadie pese a ser casi unos desconocidos. Pero también se sienten atraídos, y en ese momento Gaby simplemente lo acepta pero a Bryce se le desmonta toda su perfecta vida y sus planes en Londres y no sabe cómo reaccionar, pero lo cierto es que desde que conoce a Gaby se siente como un hombre distinto, ella le insta a ser más impulsivo y despierta su ternura, también le sorprende su franqueza.

Y mientras se desarrolla la historia de amor los recuerdos del pasado vuelven a Gaby, recuerdos de una noche en la que no sabe muy bien que ocurrió. La historia de suspense se mezcla con la historia de amor y Bryce tiene que ayudar a Gaby a superar el miedo para seguir adelante. En algunos aspectos se parecen pero en otros son distintos y se complementan el uno al otro.

En la mansión de Hermione hay unos sirvientes muy especiales, gente a los que no aceptaban en otros lugares y que ella acogió, todos ellos no son solo criados sino una parte esencial de Nevon Manor, una familia, como ellos mismos dicen. Pero los secundarios que más destacan son Hermione, una mujer generosa y buena pero a la que le gusta hacer planes para la gente que quiere; Chuance, el fiel mayordomo de Hermione, que le ayuda en todos sus planes; y Thane, el hermanastro de Bryce e hijo legítimo de su padre, al que Bryce conoce a instancias de su tía y con el que congenia enseguida, son mucho más parecidos entre ellos que con su padre; me encanta la relación que se establece entre los dos.

El final es fluido y no precipitado, me gusta que no haya que esperar hasta el último capítulo para saber cómo acaba la historia de amor. Los protagonistas tienen las ideas bastante claras antes del final, pero aún tienen que resolver un misterio. Y en el epílogo sucede algo que no me esperaba y me ha sorprendido.

Tanto la historia de amor como la de suspense están muy bien y enganchan, no se hace pesado y se lee bastante rápido. Me ha gustado.