Ya lo he terminado y desde luego lo recomiendo...
Ojo, es una lectura relajada en la que casi la mayor parte del libro pasan pocas cosas... pero sonsiguió atraparme, gracias a su forma de escribir, en esta historia tan cotidiana.
Los personajes me han gustado mucho, sobre todo Mercedes, una mujer adalantada a su época que tiene muy claro lo que quiere y no tiene ningún reparo en lanzarse de cabeza a buscarlo.
El elenco de secundarios que rodea a los protagonista tienen su propia historia, haciendo que no solo gire alrededor de los dos personajes más importantes. Todos tienen su peso, de algunos, con ciertas pinceladas, se nos cuenta un pequeño trocito de su vida, y quien sabe... quizás Teresa Cameselle se anime y nos acabe escribiendo sus propias aventuras.
La ambientación me ha parecido exquisita, quizás sea debilidad mía, reconozco que cualquier libro ambientado en España me resulta delicioso de leer, pero está escrito de una forma tan elegante que sumergirte en sus páginas es un placer.
Es cierto que, excepto al final, no pasan grandes cosas. Pero resulta embaucador ver ese amor que ya ha surgido, plátonico como se va, poco a poco convirtiendo en un amor real, y como un amor que aún no existe acaba siendo, también un amor totalmente real.
No puedo explicar bien bien qué es, pero me he visto atrapada en una historia, corriente, pero no por ello menos bonita... con algunos personajes de lo más dulces, a veces tercos y obstinados...
El único pero, quizás el final.... entre ellos, algo precicipado y otros temas... raros.
El título, precioso.
Me había leído Falsas ilusiones, un relato cortito que me gustó mucho...
Ains.. ahora me tengo que leer sí o sí, La hija del cónsul
Un besote