TIEMPO DE TRAICIONES – Rosemay Rogers
Había descubierto dentro de sí misma una fuerza de espíritu que le iba a permitir luchar por lo que realmente deseaba...
Después de que la abandonaran en el altar, Talia Dobson sufrió una nueva humillación: ¡tener que casarse con un sustituto! El hermano mayor de su prometido huido había decidido afrontar las consecuencias de la irresponsabilidad de su hermano. Talia siempre había sentido una secreta atracción hacia Gabriel Richardson, el guapísimo conde de Ashcombe. Pero después de la boda y de una sola noche de pasión, él la mandó al campo sin sospechar que ese único encuentro había despertado dentro de ella un fuego intenso y completamente nuevo.
Por muy lejos que estuviese su bella esposa, Gabriel no podía dejar de pensar en ella y, cuando se enteró de que la habían secuestrado unos espías franceses, el conde tuvo miedo de perder para siempre lo que apenas acababa de descubrir. Pero la mujer a la que iba a intentar salvar ya no se parecía en nada a la joven tímida que había enviado a su solitaria casa de campo. La nueva Talia estaba dispuesta a reclamarle a su marido lo que merecía y deseaba.
En esta novela esperaba encontrar la típica historia sobre un matrimonio de conveniencia, compuesto por dos personas que pasan de ser unos meros desconocidos a enamorarse de verdad. Pero he encontrado más que eso. Se trata de una novela de aventuras con secuestros, persecuciones, rescates y huidas. Todo ello propiciado por una entretenida trama de espionaje desarrollada entre Inglaterra y Francia como telón de fondo.
Talia es una joven intelectual que no sabe cómo coquetear en sociedad, y eso provoca las burlas de la nobleza y el resto de debutantes. Ella me ha gustado desde el principio por su valentía y su dulzura, es una protagonista que se hace querer y cae bien con facilidad. Es fácil comprenderla y compadecerla cuando la sociedad la llama «la pavisosa Dobson» porque es diferente a ellos, menos artificial y más auténtica. Pero es cuando asegura que le gustaría tener un hijo para poder darle a alguien el amor que todos los demás han rechazado que me ha conmovido. Además, me gusta cómo evoluciona, pasa de ser una prometida tímida e inocente a una esposa valiente y con carácter, pero sin llegar a cambiar tanto como para que resulte algo incoherente.
Gabriel trata con desdén a la sociedad porque no le gusta relacionarse con la aristocracia, tan vacía y superficial, pero sigue siendo un hombre socialmente admirado. Cuanto más los desprecia él, parece que más apreciado se vuelve. El desprecio que muestra por su prometida no es otra cosa que la manera de expresar su enfado por verse presionado y obligado a casarse, porque cree que ella es una mentirosa que intentaba atraparlo. Pero su comportamiento le hace plantearse la duda de si es una buena actriz u otra víctima inocente como él. Al principio es un hombre estirado y frío que no quiere creer en el amor, pero los recientes acontecimientos le hacen ver la cosas de forma distinta y dejarse llevar por sus sentimientos hacia Talia.
La historia de amor me ha gustado, empieza como el típico matrimonio de conveniencia forzado, aparentemente no deseado, aunque los dos protagonistas sentían cierta atracción desde antes. Las circunstancias de la boda no permiten que el nacimiento del amor sea muy propicio, y Gabriel acaba siendo innecesariamente cruel con Talia. Pero los acontecimientos posteriores hacen que pronto él se arrepienta de su actitud y actúe como el esposo protector que es por naturaleza, el hombre que Talia merece. Y es en esa situación cuando la llama de la atracción se convierte en un amor marcado por la aventura, cuando ambos protagonistas empiezan a conocer de verdad a la persona con la que se han casado.
El personaje secundario más importante es el villano de la historia, que no es presentado como completo malvado sino como la otra cara de la guerra. Un hombre con una historia propia muy interesante, con su historia de amor paralela, con sueños, deseos y objetivos. De hecho, no me sorprendería si tuviera un libro propio, aunque sigo prefiriendo a Gabriel con creces.
Otro personaje que tiene su pequeña historia es Hugo, el amigo de Gabriel, quien acompaña a los protagonistas en su aventura. Me ha gustado este personaje por la relación que tiene con Gabriel, y el sentimiento de recelo que le provoca Talia y que acaba convertido en uno de profunda admiración.
También tengo que decir que me ha parecido un poco extraño el personaje de la madre de Gabriel, porque muestra dos caras demasiado distintas de sí misma como para resultar creíble. Su cambio de actitud no me ha convencido.
Es una historia de espías muy entretenida donde no hay tiempo de aburrirse. Los protagonistas me han gustado por su carácter, también como pareja; y hay personajes secundarios interesantes. No es una novela memorable, pero sí ha sido más de lo que esperaba; una historia amena y llena de aventuras, que es lo que más me ha gustado.