- Isabel escribió:
- Inca escribió:
- Pregunta tiene algún libro que no tenga intriga, crimen, misterio??? me gustaría leerlo.
ayyyss!!es que sus intrigas estropean los libros, una y otra vez, si no insistiera en meter un crimen o un misterio sus libros estarán bien, pero se pone a escribir unas tonterias en medio de una buena historia que te deja menuda estupidez.
Suscribo las palabras de Inca.
Habéis leído
Lecciones Privadas es preciosa
y es que Wolf no deja indiferente además creo que hace poco salió en harlequin Mira,es el 1º de una serie peor se puede leer independiente ya que los otros de la serie son la historia de los hijos y
aquí no hay misterios grandes Wolf Mackenzie es un hombre que ha sufrido en sus propias carnes el
racismo de una sociedad que lo desprecia por ser un mestizo. Hace un
tiempo, fue acusado de violación y encerrado en prisión alejándolo de
aquello que más quería: su hijo Joe. Pero corriendo por sus venas la
sangre de sus antepasados guerreros, tanto indios como celtas, Wolf no
se rindió y volvió al pueblo que le acusó de tal delito. Ahora, sólo
vive para trabajar en su rancho de cría de caballos y se ha prometido a
sí mismo no volver a sentir ningún tipo de dolor por los desprecios y
humillaciones a los que se vea sometido por los lugareños. Con lo que
nunca contó, es con la aparición de una mujer que haría que su vida
diera un giro de ciento ochenta grados y le enseñara lo que era el
verdadero significado de la palabra amor.
Mary Elizabeth Potter es una profesora con una voluntad de hierro que
se ha resignado a pasar su vida en soltería, debido fundamentalmente a
su poco atractivo aspecto. Educada por una tía solterona y remilgada,
para la cual un pequeño revolcón implicaba un pecado mortal, ahora se
enfrenta a un gran desafío. Ha sido destinada a un pequeño pueblo de
Wyoming, y está completamente decidida a que el mejor alumno que nunca
haya tenido esa escuela, regrese a sus estudios. Lo que nunca pudo
llegar a imaginar es que sería precisamente el padre de ese chico el
que la demostrara toda la pasión que su pequeño cuerpo era capaz de dar.