ado al prota 

Sobre Molly, he estado todo el libro pensando que no era la institutriz sino la amante mayo que había instruido a Jeffrey, o las dos cosas  O que era un fantasma, siempre que une personaje tiene contacto sólo con una persona lo sospecho  El cambio del hermano de Jeffrey no me lo acabo de creer. Y no sé si al final Augustine se casará con Monica, la chica parece un poco "mala"  

4 Estrellas. Iba con expectativas muy bajas respecto a éste libro, porque lo anterior que había publicado Julia London no valía nada, sobre todo el primero de la serie, que me disgustó demasiado. También es cierto que al igual que ocurrió con “Juego secreto”, temía que la protagonista, Grace, fuese una aprovechada como su hermana mayor.

Los motivos de Grace para hacer lo que hace no son nada honorables, eso por descontado. Si Honor me horrorizó en “Juego secreto” mediante una actitud tan mezquina como separar a una pareja que se ama para que ella no pierda su estatus, la decisión de Grace no es mucho mejor. Sí, las hermanas Cabot están en un atolladero, y sus posiciones penden de un hilo, sobre todo porque su madre está perdiendo su salud mental, y solo eso era motivo de escándalo y exclusión social.

En el anterior libro Honor pudo solucionar su problema particular, y sobre Grace solo supimos lo que tenía pensado hacer, seducir a un vizconde para que se viera obligado a casarse con ella, y así pudiera cuidar de ellas y de su madre. ¿Verdad que los motivos son egoístas? Pues lo cierto es que este plan le salió mucho mejor de lo que creía, porque el caballero a quien tenía pensado seducir, no se presentó en la trampa, si no que lo hizo el hermano mayor de éste, el conde de Merryton.

Jeffrey Donovan, el conde de Merryton, es un hombre extraño, raro, excéntrico, frío y solitario. Jeffrey vive una vida de pulcritud y orden sin par; para él todo es lógico y medible, y tiene un particular fetiche con el número ocho. Por consecuencia de ser tan extraño, es un hombre solitario que rara vez frecuenta la alta sociedad porque no sabe comportarse. Pero hay algo más oscuro en Jeffrey que él intenta mantener oculto a toda costa, y es que con su carácter y forma de ser, no concuerda para nada el rol que ha querido darle la autora, la mente de Jeffrey está sucia y llena de perversiones sexuales, él sabe que está mal pensar así y no puede evitarlo, por eso, para él es una tortura estar tan cerca de una mujer tan hermosa como Grace, y no querer hacerla daño o corromperla como quiere su mente. La verdad que la fantasía a lo rollo Grey se lo podía haber ahorrado la autora y quizás el libro habría subido la última estrellita.

La vida de Grace da un vuelco tremendo cuando se da cuenta del error que ha cometido, sabía que era un error atrapar a un caballero como había pensado, lo que no sabía es que el error sería mayúsculo cuando quien entró en aquella oscura sala era otro hombre, un hombre misterioso que supo besarla y darle lo que quería, pero un hombre que no comprende, que no conoce y que la asusta. De modo que su relación solo puede empezar de una manera, como matrimonio de conveniencia que se ven obligados a aceptar tras ser pillados en flagrante delito. 

Poco a poco Grace deberá ir acostumbrándose a su nueva situación, su nueva casa, la mansión campestre de su esposo, donde éste está la mayor parte del tiempo, pues no frecuenta la sociedad; su nueva vida, su soledad sin sus hermanas, y un esposo al que no comprende, ni a él ni a sus manías. En cierta manera, Jeffrey es algo Asperger, es muy inteligente, ordenado y metódico y espera que todo esté como desea, si no, pierde sus casillas, así que Grace pone su vida patas arriba y su paciencia hasta el límite.

Así que ¿Qué es lo bonito que ha tenido el libro? En general la historia, me gustan los protagonistas que tienen algún tipo de tara, o simplemente rarezas que se salgan de lo común, y así ha sido Jeffrey. Lo que menos me ha gustado es el rollo Grey que le ha dado Julia London, creo que no lo necesitaba, además de que al libro le sobraban algunas pocas escenas de sexo, y estoy hablando de un libro que en extensión es muy cortito, creo que podría haber rellenado algo más simplemente viendo cómo evolucionaba la historia de los protagonistas, de ser unos extraños a conocerse, a apreciarse y a llegar a algo más, eso es lo que ha hecho al libro bonito.

No será la mejor serie de Julia London, pero de vez en cuando escribe algún libro que sorprende y éste me ha convencido, salvo el detallito que menciono más arriba. Por suerte la actitud de Grace ha cambiado mucho desde el inicio y me ha gustado más de lo que pensaba, y Jeffrey me ha gustado enterito salvo sus perversiones, pero al fin y al cabo lo que me ha gustado es cómo evoluciona y se abre a Grace.

Sólo me queda el libro de Prudence, que con ése final que ha dejado la autora se prevé que su historia está a punto de empezar. Espero que por lo menos me guste, si no tanto como éste, más que el primero.