El deseo de un policía de saber más sobre la vecina de al lado podría resultar mortal.

Siendo responsable de la muerte de un pérfido traficante de mujeres, Alice Appleton vivía permanentemente bajo el temor de las represalias. Por eso nadie sabía nada de su pasado, y así le gustaba que fueran las cosas... hasta que el sexy policía vecino suyo llamó a su puerta.

El detective Reese Bareden creía saber cómo atraer a una mujer, pero la evasiva vecina le hizo replantearse sus conocimiento ¿Debería ser su objetivo desenmascarar los secretos de Alice? ¿Debería protegerla de una nueva y peligrosa amenaza? Lo único seguro era que la química entre ellos era una bomba de relojería a punto de estallar. Sin nadie en quien poder confiar, excepto el uno en el otro, pronto Reese y Alice se vieron arrastrados a un mortal laberinto de corrupción, intriga y deseo. Todo en primera línea de fuego...

Segundo libro de la serie «Amor encubierto».

Este segundo libro está bastante unido al primero, tanto en las relaciones entre personajes como en el caso que se investiga, así que recomiendo leerlos en orden. De hecho, esta novela empieza una noche después de los acontecimientos que tuvieron lugar al final de «Amor encubierto».

De nuevo tenemos un caso de tráfico de personas, pero la oscuridad de este tema tan escabroso se compensa con el sentido del humor que transmiten Reese y Cash, su adorable perro. Ya con la primera escena, con Reese soñando y dándole un beso al animal por error queda clara su sintonía.

Reese es un hombre maravilloso y un policía concienzudo que me ha gustado. En el primer libro de la serie ejercía de compañero del protagonista, pero la autora jugaba con la corrupción de la policía y nos hacía dudar de su honestidad, así como la de otros personajes que resultaron limpios. Entonces las dudas no dejaban que le cogieras cariño y ahora te preguntas por qué dudabas de un hombre como él. Si había algo que decantó la balanza fue su historia con Cash, cómo le salvó la vida y lo adoptó, y el cariño y paciencia con que lo trataba entonces y ahora.

De Alice no tengo tan buena impresión. Me gustó en el primer libro, no se limita a ser una mera observadora, es una persona de acción y quedaba claro que había una historia de violencia en su pasado, pero me ha parecido que no se profundizaba en ella. Su secreto es rebuscado, tanto ques es difícil de creer y le da un punto de incoherencia a la novela. Su secuestro, su actuación y el héroe misterioso son elementos irreales, y su lado de extrema buena samaritana también, es increíble que una persona se arriesgue de esa manera por alguien desconocido sólo por una sospecha.

La historia de amor en realidad comenzó durante el romance que protagoniaron Pepper y Logan. Reese y su nueva y huidiza vecina se sienten atraídos, pero tras lo sucedido el día anterior —véase el final de «Amor encubierto»— Reese no quiere dejar sola a Alice y quiere descubrir su pasado y, posteriormente, protegerla.

Su romance es bastante dulce, igual que el de Reese con su encantador perro, a quien también protege. Ene realidad es Cash el que genera el acercamiento entre la pareja, porque Alice no intima con la gente, pero sí lo hace con el perro de su vecino.

Los personajes secundarios son importantes en esta serie porque se ve la evolución de todas las relaciones, no sólo de los protagonistas. Y no sólo las románticas, también las de amistad. No eclipsan la relación de Alice y Reese, pero aprovechan bien sus apariciones.

Pepper y Logan en realidad hace sólo una noche que han tenido su final feliz, así que son dos tortolitos enamorados, pero no empalagosos. Y se acercan dos nuevas relaciones que ya se intuían desde el primer libro.

En primer lugar Rowdy, hermano de Pepper, un hombre decente pero al borde de la ley y Avery, una misteriosa pelirroja, camarera del antro que Rowdy acaba de comprar. En el pasado de Avery también hay algo peligroso.

Y la sorprendente atracción entre el hermano de Logan y la teniente de éste y Reese, al principio engañan al resto ignorándose, pero la declaración de Dash afirmando que a ella la llaman Margo cuando para los otros dos es un robot lo encamina todo.

Dos historias que pintan muy bien, con unos personajes interesantes.

Una historia entretenida que sigue la estela del anterior, con algún toque de humor y un protagonista masculino maravilloso, en el caso de Alice, me gusta más Pepper y eso le resta un poco al romance. Pero la mezcla de amor y acción está equilibrada y presenta dos nuevas parejas llamativas.