que curiosidad la vuestra niñas... pues pongo (copio y pego) aqui el nacimiento de la Aste Nagusia... espero que con esto sirva...
Antecedentes…
Hace 32 años en Bilbao se produjo un fenómeno socialmente insólito para una población de sus características y dimensiones. Para los menores de treinta y pocos años, Aste Nagusia es algo "de toda la vida" y para los que rebasan esa edad, aunque ya remoto, recuerdan aquellos veranos.
En el verano (agosto) de 1.977 y años precedentes: Bilbao era un desierto.Las vacaciones concentradas en ese mes dejaban despoblada la Villa, había más bilbainos/as fuera que en casa, lo que hacía que la hostelería se sumara al éxodo y también cogiera vacaciones.
Y en ese mes ocurría, es un decir, la Semana Grande, que ni si quiera tenía eco en la prensa, salvo algún suelto anuncio algún aislado festejo, tal como combates de boxeo o lucha en un Ring instalado en una balsa fondeada en la Ría, algún alarde de Danzas Vascas de la Sección Femenina, Las barracas se movían como apestadas de ubicación en ubicación cada vez más marginadas, convirtiéndose para los barraqueros Bilbao en plaza de segunda.
Y los toros, las corridas generales, el único residuo de la Semana Grande y la presencia de algunas compañías de teatro que en hacían sus giras "por provincias" recalaban en Bilbao.
… Consecuentes…
Sería prolijo recordar los desencadenantes de los sucesos de agosto de 1.978, pero el resultado es que a raíz de un concurso de ideas para una Semana Grande popular, el colectivo popular de EMK, Txomin Barullo se alza con el premio y apoyado por las AAVV, exige que no se quede en un mero galardón sino que se lleve a la práctica.
La presión vecinal se impone y se nombra la primera Comisión Popular de Fiestas.
En este proyecto figura la creación de grupos o cuadrillas de animación que con el nombre de Comparsas aparecen espontáneamente sin ningún plan prefijado ni tan siquiera idea de continuidad.
En dos meses y con un presupuesto ridículo se organiza la más deliciosa locura, que quienes la vivimos no podremos olvidar nunca.
El éxito sorprende a propios y extraños. Como dijo Jovellanos:" a los vascos no hay que organizarles festejos, basta con facilitarles el cauce para que ellos solos las organicen".
Todos los vecinos y vecinas que están en Bilbao acuden al Arenal y al Casco Viejo. La noticia salta a la prensa y empieza a correr de boca en boca y comienza el éxodo pero al revés.
… Y Conclusión
Las Comparsas se reúnen y surge, como es lógico, La Coordinadora de Comparsas de Bilbao. Al margen de recuperar los Carnavales, deciden dar continuidad al empeño de la ya "Aste Nagusia" y con el primer Ayuntamiento democrático ,surge la segunda Comisión Popular de fiestas.
Este año se perfila el programa y modelo que, con retoques, ha llegado hasta hoy.
A partir de agosto de 1.979 el verano de Bilbao ya no será lo que era. Los bilbaínos reservan parte de sus vacaciones para Aste Nagusia, Bizkaia se vuelca en un fenómeno nuevo y ahora ya tradicional, con las consecuencias que a continuación expondremos.
Consecuencias de 1.978 - 1.979
La Hostelería empieza a hacer el agosto en agosto.
El teatro bilbaino ya no es la clásica "gira por provincias" se convierte en una plaza importante (no nos olvidemos de Julián Vinuesa tristemente desaparecido, que vio con agudeza la proyección de Aste Nagusia.)
Las barracas encuentran un sitio excelente y acuden a Bilbao los aparatos más espectaculares.
Los transportes públicos van y vienen repletos de propios y extraños con unos servicios especiales cada vez más completos.
Aquella loca experiencia de 1.978 tuvo sus inconvenientes. No está de más comparar aquellos endebles tinglados con los actuales en constante mejora.
Tampoco se puede dar de lado la mejora en cuanto a limpieza e higiene.
Es incomprensible que todos guardemos en grato recuerdo de aquellos dos primeros años en que casi nadie cuestionó ni el modelo ni el desarrollo de las Fiestas y hoy, cuando tanto se ha mejorado , se cuestionen siendo Aste Nagusia , como es, un referente a nivel estatal e internacional con una afluencia de personal hace todavía no muchos años impensable.
En esta realidad actual, las Comparsas, como elemento dinamizador de las Fiestas, participan no sólo durante su celebración, no olvidemos Carnavales y otros eventos, sino que mantienen una dinámica de trabajo durante todo el año, de forma voluntaria, aportando no sólo ilusión, sino en muchos casos los conocimientos y medios profesionales de forma desinteresada.
Así somos y así seguiremos