Me cuesta un poco imaginar bien todo lo que intenta describir la autora, porque, desde mi punto de vista, le falta dar detalles y a veces es un poco confuso lo que intenta describir en una escena (quizá es que estoy habituada a Sarah J. Maas, que es impecable).
Al principio tenía mucha manía por la protagonista, pero Jaxon (el chico) me gustó mucho al principio.
Su faceta de "malote", como dicen en el libro, es muy sexy.