Corrientes ocultas – Christine Feehan
Con este libro, finaliza la saga de las Hermanas Drake, una saga que, particularmente, ha ido decayendo con el avance de los libros.
Elle, la menor de las hermanas Drake y en la cual yace el legado de la familia (ella es la encargada de transmitir los poderes de la familia a la siguiente generación), es una espía del gobierno. Utiliza sus dones para encerrar a personas que hacen peligrar la seguridad nacional.
En una de estas misiones, Elle es secuestrada por un hombre que también tiene poderes y que la encierra en su isla donde ella no puede usar los suyos. Sólo gracias a la conexión que tiene con Jackson consigue ponerse en contacto con ellos y poder ser liberada aunque a un alto coste.
El libro es un poco duro porque Elle es secuestrada durante un mes por un hombre que se ha obsesionado con ella. De modo que durante ese tiempo, le hace de todo. Por suerte, la autora no se recrea en esto más que en una escena concreta y el resto, nos lo cuenta sin tener que ser partícipes de ello.
Pero esto, evidentemente, hace que Elle esté marcada durante el resto del libro. También descubriremos que el pasado de Jackson es también bastante malo, con ciertos hechos que también le han dejado huella.
De modo que gran parte de la relación que vemos durante el libro es como sobrellevan e intentan hacer frente a su pasado, aunque por supuesto, Jackson lo lleva mejor porque hace más tiempo que sufrió el suyo.
Y aquí es donde entramos en lo denso que se me ha hecho el libro. En los últimos libros que he leído de ella tanto de esta saga como de los Cárpatos, la autora se hace un poco pesada recreándose en la amargura de los personajes, y aquí hace lo mismo, lo que a mí, particularmente, me cansa bastante. Este libro se hace más turbio y pierde la ligereza de los primeros, donde los personajes no son tan amargados y sus historias son más dinámicas. No se centra en cómo viven la relación, cómo se desarrolla y las vivencias con el pueblo y la trama extra del libro. Aquí es sólo recrearse en el sufrimiento de los protagonistas, y es por eso que me ha costado acabar el libro.
Tras recuperar a Elle del secuestro es como si continuaran una relación sentimental ya empezada. No hay un inicio, simplemente, ellos dos lo dan por hecho. Así que no hay un desarrollo de acercamiento de los protagonistas. Ya están cerca. Y lo que trata el libro es de sobrellevar su pasado y el temor a que le vuelva a pasar (puesto que su captor sigue libre y acechándola).
Por otro lado, si en el anterior libro comenté que cada vez había más semejanzas con la saga de los Cárpatos, aquí no es diferente. Hay muchas semejanzas. Es como si la autora no tuviera más ideas que hacer todos sus libros con un hilo semejante de fondo, por lo que cada vez me decepciona más leer un libro de ella. Tienes que remontarte a los primeros libros suyos escritos para leer algo diferente, antes de que todos se conviertan en Cárpatos y sucedáneos.
Por suerte, también aparecen en la historia el resto de hermanas y sus parejas amenizar un poco el libro y no centrarse sólo en la amargura de los protagonistas, y parte de la generación anterior que tan desapercibida ha pasado por la saga. Creo que ha sido una pena que no explotara más el tema de la madre y las tías de las hermanas Drake, puesto que también son mujeres con los dones de ellas y podrían haber participado más en las historias de nuestras protagonistas.
En definitiva, es un libro demasiado amargo para mi gusto como son casi todos los libros últimos que está escribiendo esta autora. Sé que hay a gente que le gusta este estilo de personajes torturados, incluso a mí me gusta cuando son personajes marcados por su pasado. Pero no me gusta que todo el libro sea sobre eso y para mí, ésta es la mayor pega del libro.