Kilraven, un agente de la CIA alto, atractivo y tenaz, vivía conforme a sus propias reglas. Y una de ellas era mantenerse alejado de Winnie Sinclair, una chica de Jacobsville por la que sentía una fuerte atracción. Tímida e inocente, Winnie no sabía cómo tratar a un hombre como Kilraven, implacable y atormentado por su pasado. Era posible, además, que Jacobsville ocultara secretos capaces de resolver un caso cerrado que tocaba muy de cerca a Kilraven.

Winnie intuía su dolor. Ella también había sufrido. Por más que intentara negarlo, la amable operadora del servicio de emergencias se sentía unida al sombrío y atractivo agente. Cuando él descubrió que el turbio pasado de la familia Sinclair podía estar relacionado con el caso que investigaba, Winnie decidió ayudarlo a encontrar respuestas... y a romper el hielo que cubría su corazón.

Ambos unieron sus fuerzas en una peligrosa investigación en la que había mucho en juego. La vida de Winnie corría peligro, y necesitaba a Kilraven más que nunca. Pero si querían tener un futuro juntos, el implacable agente tendría que enfrentarse a su pasado y arriesgarlo todo por su amor.

Relacionado con la serie "Hombres de Texas".

En esta ocasión Diana Palmer nos transporta de nuevo a Jacobsville y nos regala una historia sobre vaqueros, pero donde los ranchos no adquieren tanto protagonismo, es una novela centrada en el cuerpo de policía de Jacobsville y en algunos crímenes sin resolver. La investigación se mezcla con una historia de amor preciosa, pero además tiene momentos muy emotivos tanto para Winnie como para Kilraven.

Kilraven es un personaje ya conocido para las seguidoras de Diana Palmer. A mí me llamó enseguida la atención porque tenia carisma y no se sabía mucho sobre su pasado, pero en libros anteriores se descubre que su mujer y su hija fueron asesinadas. Y el que fuera el protagonista ya fue suficiente aliciente para leer el libro. Kilraven es un agente de la CIA, ha trabajado en las operaciones encubiertas más peligrosas en Oriente Medio, pero también es un hombre atormentado por el pasado, los últimos siete años solo ha vivido para vengarse.

Winnie procede de una familia adinerada pero trabaja como operadora de emergencias y es por ello que conoce a Kilraven. A veces tiene presentimientos y sabe cosas de la vida de la gente y cuándo necesitan ayuda, como la vez que salvó a Kilraven enviando refuerzos antes de que él los pidiera. Es una chica joven e inocente que pagó las consecuencias del abandono de su madre y le tiene cierto temor al género masculino, pero no está dispuesta a dejarse pisotear por ningún hombre más.

Winnie está enamorada de Kilraven y él lo sabe. Kilraven se siente atraído por esa chica dulce e inocente pero no quiere volver a casarse ni tener más hijos y revivir el dolor aunque Winnie despierta en él un sentimiento entre ternura y deseo. Pero mientras Winnie le ayuda en su investigación la pasión y el deseo le hacen perder la cabeza en un par de escenas que me han gustado mucho.

Los secundarios me han gustado, han hecho la historia más emotiva. El hermano de Kilraven, Jon, es un agente del FBI, y al igual que Kilraven ya había aparecido en libros anteriores y tiene bastante protagonismo e incluso se puede vislumbrar una posible futura pareja para él. Las discusiones entre los dos hermanos son muy divertidas, también lo son las apariciones de la madrastra de Kilraven.

Los hermanos de Winnie, Boone y Clark, que junto a ella deberán hacer frente a un hecho del pasado que tuvo múltiples consecuencias sin que ellos supieran nada hasta ahora y que provoca escenas de reencuentros y descubrimientos muy emotivas.

La madre de Winnie, que los abandonó doce años atrás, tendrá un gran protagonismo y es un personaje esencial. Y Matt, no revelaré quién es, pero su aparición me ha conmovido y le da a la novela un aire de ternura e inocencia muy emotivo.

Hay algunos puntos que me han impactado un poco, pero solo son pequeños detalles sin importancia.

Primero que los personajes sean tan conservadores. Kilraven lleva siete años de abstinencia sexual, desde la muerte de su esposa, porque cree que para tener relaciones sexuales hay que pasar por el altar. Pero al mismo tiempo que sea tan conocedor del placer femenino habiéndose acostado solo con una mujer y si su matrimonio duró tres años.

Y también que haya tanta gente con ciertos poderes premonitorios o para saber cosas del pasado.

Me ha parecido una historia preciosa y muy amena, el crimen que intenta resolver Kilraven sirve para unirle a Winnie pero no le quita en absoluto protagonismo a la historia romántica, que es el eje principal. El ritmo es rápido y no me he aburrido en ningún momento, Kilraven tiene la personalidad suficiente como para captar la atención de la lectura con solo aparecer en escena.

Creo que este libro cumple y supera las expectativas de las novelas de Diana Palmer, pero no solo eso, me ha gustado mucho, sobre todo porque los personajes tienen carisma, sobre todo Kilraven, aunque a veces es injusto con Winnie en los momentos en que la venganza le ciega, pero es un personaje complejo. Tanto el libro como Kilraven me han sorprendido gratamente en más de un sentido.

Además, la portada me ha encantado, es una imagen que evoca la vida en Jacobsville.