Leonora es bella y apasionada; sin embargo, el matrimonio es el último de sus objetivos. Pero el experimentado conde no acepta su negativa, por eso, cuando un misterioso hombre entra en la casa de Leonora y la intimida, Tristan encuentra la excusa perfecta para ofrecerle sus servicios como su protector, confidente y seductor marido...
Primer libro de la serie "El Club Bastion".
El Club Bastion se forma cuando siete ex espias de la Corona Británica recien retirados se encuentran, todos ellos habían oído hablar unos de otros pero ninguno los conocía a todos en persona. Casualmente todos han heredado un título nobiliario repentinamente mientras aún estaban de servicio o acababan de volver a casa. Aparte de esos dos rasgos en común, sienten que después de tanto tiempo de servicio ya no están familiarizados con las normas de la alta sociedad. Ni están a gusto en los clubes de caballeros normales, donde dada su nueva condición, se ven acosados. Por eso deciden unir fuerzas para ayudarse a evitar el acoso de las debutantes y sus madres, sólo elegirán a la esposa que ellos deseen. Su unión me ha recordado al pacto que hicieron las Wallflowers de Lisa Kleypas en su momento, de ayudarse en su búsqueda de esposo, pero en la situación inversa. Así nace el Club Bastion, como una especie de club privado donde los siete amigos se reúnen para buscar tranquilidad.
Tristan es el protagonista que inicia la serie. De todos los miembros del recien fundado club, Tristan es el que más urgentemente necesita una esposa. La condición para heredar las propiedades y fortuna es que debe casarse en el plazo de un año, además debe matener a una tribu de adorables y entrometidas ancianas parientes, nada menos que catorce. Y todo porque su antecesor odiaba a su abuelo y su descendencia y quiso ponerselo difícil. Tristan acaba de retirarse del servicio a la Corona, pero los extraños sucesos que han sucedido en la casa situada junto a la del club le obligan a intervenir, porque Leonora no tiene nadie que la proteja correctamente y ella misma es un peligro para su propia persona. Tristan estaba decidido a buscar una esposa sumisa que se dedicara a cumplir con sus obligaciones, pero en cuanto vió a Leonora supo que le traería problemas y trastocaría su mundo.
Me pregunto por qué las protagonistas que presumen de ser las más sensatas son las que tienen menos sentido común... Leonora es una joven independiente que vive con su tío y su hermano hasta que Tristan aparece en su vida. Su tranquila vida se ha visto afectada últimamente por algunos incidentes relacionados con la casa de su tío. Su comportamiento a veces me ha desconcertado, no entiendo cómo puede pensar que puede disuadir a los malos ella sola poniéndose en peligro, es inverosímil. También tiene una exagerada aversión hacia el matrimonio, pero cuando conoce a Tristan y sienten una atracción mútua decide que a su edad ya puede permitirse conocer la pasión sin necesidad de casarse, siempre que sea con discreción y así planea seducirle.
Los dos se sienten atraídos desde el principio y la investigación les sirve de excusa para pasar más tiempo juntos. Leonora no quiere tener nada que ver con militares -así es como se presenta Tristan públicamente- porque considera que no son de fiar y son demasiado volubles. Y Tristan debe centrarse en encontrar esposa en los meses de los que dispone, y no imagina otra candidata menos apropiada que la impetuosa Leonora. Pero se acaba forjando una danza de seducción por ambas partes, y la más directa acaba siendo Leonora. Durante la primera parte de la novela se establece un flirteo entre los protagonistas, pero una vez que su relación se consuma no he acabado de entender la repentina frialdad de ella, hasta que comprende que etá teniendo un comportamiento absurdo y decide remediarlo.
Me ha sorprendido un poco la poca presencia del resto de miembros del Club Bastion, los protagonistas de los próximos libros, durante la mayor parte del libro. Aparecen al principio, cuando se los presenta a todos, y luego en los últimos capítulos; supongo que esto se debe a que el club aún no se había acabado de establecer. También menciono al hermano y al tío de Leonora, dos eruditos bastante insulsos, porque no les preocupa nada más que las antiguas civilizaciones y prefieren eludir cualquier otro asunto y pensar que no existe; no me extraña que Leonora busque aventuras insensatas porque ellos la ignoran totalmente siempre que es posible. Y para darle un toque de humor están la legión de ancianas entrometidas y vivarachas formada por las catorce parientes de Tristan y las dos tias de Leonora, un frente infranqueable.
Como curiosidad, mencionar que hay una breve aparición en representación de la família Cynster. Nada menos que la presencia de Diablo, y espero que la serie de los Cynster sea posterior en el tiempo a esta, porque Diablo sólo aparece para coquetear con la protagonista hasta que Tristan lo espanta sutilmente.
La historia me ha gustado, pero en algunos momentos se hace algo lenta, aunque sin llegar a resultar pesada. La cuestión es más bien que le sobran páginas. La historia de amor da más rodeos de los necesarios y la trama de misterio queda algo olvidada durante varios capítulos, no es hasta que la relación de Leonora y Tristan queda más o menos asentada cuando la otra trama cobra protagonismo. La parte de los incidentes me ha parecido interesante, pero los villanos de la historia son bastante insípidos, una vez se descubre de qué va el asunto se les desenmascara muy fácilmente.
No deja de ser una historia más de Regencia, sin nada especialmente destacable, pero me ha gustado porque es entretenida.