Sinopsis

Bienvenido de nuevo a Grace Valley, en California. El lugar en el que las mejores cosas de la vida nunca cambian...

En este pueblo tranquilo, los vecinos cuidan unos de otros como si se tratara de una gran familia. En una comunidad así es difícil guardar un secreto. Sin embargo, la doctora June Hudson ha conseguido algo portentoso... Aunque las visitas de su amante secreto, el agente de la Agencia Antidrogas Jim Post, eran tan clandestinas como apasionadas, encajaban con su exigente horario de médico de pueblo, una profesión que requería la capacidad de existir a base de cafeína, bollos de azúcar y nervios de acero.

Pero, ¿cómo iba a competir un amante secreto con un novio del pasado, con alguien de carne y hueso? El antiguo amor de June había vuelto a Grace Valley después de veinte años, y divorciado. June se sentía muy insegura. Así pues, cuando una de las esposas más enamoradas del pueblo le disparó unos perdigones a su marido en el trasero y en el jardín de la casa de la tía de June, Myrna Claypool, aparecieron unos huesos humanos, June casi agradeció la distracción.

Más tarde o más temprano, el amor se abriría paso en Grace Valley. Como siempre.


Valoración

Éste es el segundo libro de la serie "Grace Valley".

La historia sigue en el punto que se dejó en el libro anterior. En términos generales, el libro sigue la misma dinámica que "Un lugar en el valle", es decir, se sigue contando la vida de los ciudadanos de este pueblo.

Sin embargo, como punto positivo, y para alivio de mi memoria, la autora ha "recortado" la cantidad de personajes, de modo que es mucho más fácil seguir los sucesos y a quién le ocurren. Al igual que en el anterior libro, éste se centra en los hechos del pueblo más que en la relación romántica, si bien ha aumentado la cantidad de páginas en este aspecto.

Sobre esto, comentar que se forma una especie de triángulo amoroso entorno a June, Jim y un antiguo novio de June que se está divorciando. Éste se da precisamente a raíz de lo poco consolidada que está la relación entre June y Jim.

Al respecto de este triángulo, entiendo a la protagonista en cuanto al hecho de sentirse insegura frente a la nueva relación. Sin embargo, sí que me ha dejado un poco "desilusionada" en cuanto a su carácter por replantearse una relación con su ex estando con Jim. En primer lugar, porque aunque sí puede darse una inseguridad en cuanto a cómo va a desarrollarse la relación y que podría fallar, sí que hay verdadero interés en que salga adelante por parte de Jim. Es decir, que en ningún momento Jim da la sensación de no querer continuar la relación a pesar de la distancia que les separa. Pero lo que más me molestó, fue que se lo planteara con su ex, con los antecedentes que tuvo con él.

Desde mi punto de vista, Chris es un personaje bastante anodino. Tiene una seguridad desmesurada en que va a volver con June (como segundo plato) y cuando June le da a entender que hay otra persona en su vida, piensa que lo dice para vengarse de él. Es bastante egocéntrico, y malcría a sus hijos adolescentes hasta el extremo, los cuales son culpables de muchos de los problemas vecinales. Llegados a este punto, tengo que decir que mi simpatía con ese personaje era la de "métete en un pozo y echa tierra encima". De modo que cuando June da rienda a la posibilidad de empezar algo con Chris... pues eso, que me decepcionó.

Por el resto, y como comentaba al principio, Robyn Carr sigue en su línea. Trata los problemas del pueblo y sus ciudadanos, añadiendo además algunos sucesos un tanto duros de la vida real. Es algo a lo que nos tiene acostumbrados en todos sus libros, de modo que a nadie le va a pillar de sorpresa.

A pesar de haber despotricado un poco contra la protagonista y el triángulo formado, lo cierto es que el libro me ha gustado más que el primero. Supongo que el hecho de haber mayor contenido romántico y el no estar perdida con los personajes del pueblo, ha tenido bastante que ver.

Y además, el final se ha quedado bastante interesante. Tengo ganas de leer el último libro de esta serie.

Coincido en que en este libro te pierdes menos porque conocemos a todos los habitantes del pueblo, así que no hay páginas de presentación, ni flash-backs ni este tipo de elementos. Se hace más relajada la lectura.

Y coincido en que Chris es un niñato al que siempre le han bailado el agua y que nunca ha tenido que tomar una decisión en su vida. Todo ha ido para él en bandeja de plata. Desgraciadamente, hay hombres que son así en la vida real.

Sobre el tema truculento, bueno, a mí me toca de cerca porque tuve una enfermedad igual, así que no entiendo ni entenderé nunca al personaje. Poner su vida en peligro por algo que, con el tiempo, conseguiría. Puede que en la vida real haya personas que tomaron esa misma decisión, pero no la comparto. ¡Lucha por tu vida! y después, lo que sea ¡será!.