La vida de Regina Ashton, la exquisita sobrina de Edward y Charlotte Malory, cambia para siempre la noche en que es secuestrada en una oscura calle de Londres por Nicholas Eden, un arrogante seductor cuyo pasado alberga un doloroso secreto.

Unidos por la vergüenza, el escándalo y una pasión inesperada y abrasadora, Reggie y Nicholas tardarán en comprender y aceptar lo que el destino les ha reservado: amar una sola vez en la vida.

Primer libro de la serie Familia Malory.

Este es un ejemplo de novela con valor sentimental porque sé que para la mayoría no es la mejor de la serie, en cambio es mi favorita. Me gusta todo, es una de las novelas que más veces he leído, una y otra vez, y es de las pocas que nada más terminarla la volví a empezar.

Puede que os preguntareis por qué me gusta tanto... Pues bien, para empezar Johanna Lindsey es la autora con la que me inicié en el género y éste libro fue de los primeros que leí, en parte por eso le tengo tanto cariño.

En cuanto al libro en si, me gusta todo de él. La historia engancha desde el principio y la narración, el sentido del humor y los diálogos me encandilaron desde el primer momento. Me encantó que los protagonistas se conocieran enseguida y su primer encuentro cara a cara, con unos diálogos rápidos y chispeantes, creo que podría decirlos de memoria. Es de esas historias que nada más empezar sé que me van a gustar.

Y luego están los personajes. Y no solo los protagonistas, todos tienen unos rasgos muy característicos y eso hace que enseguida te identifiques con alguno de ellos y les cojas cariño.

Los protagonistas me enamoraron desde el primer momento. Desde su primer encuentro y durante cada momento que están cerca se percibe la química, la tensión sexual es palpable. Una de las cosas que más me predispuso a favor de ellos es que los dos tienen una edad parecida, circunstancia que no se da en todos los libros de la serie.

Regina me gusta por su carácter fresco, su personalidad, su inconformismo y por no tenerle miedo a la rígida sociedad londinense. Ella se enamora de Nicholas al momento pero sabe que él no es para ella y que su familia tampoco lo aceptaría. Solo que el destino interviene y no tienen otro remedio que casarse. Creo que es un acierto que Regina sea la protagonista del primer libro porque es la sobrina favorita, protegida por una legión de tíos y primos Malory, y así ir conociendo al resto de la familia antes que empezar la serie por cualquier otro miembro.

Y Nicholas es para mí el mejor protagonista de la serie pese a no ser un Malory de sangre. Sé que normalmente se prefiere a Anthony o a James, pero a mí Nicholas me gustó desde el principio. Y me gusta porque es un calavera que se parece a los libertinos parientes de Regina, es igual de atractivo, arrogante y seguro de si mismo, pero es más joven. Los piques que tiene con algunos miembros de la familia Malory no tienen desperdicio, y no solo en este libro. Las peleas con Anthony y con su archienemigo, el pirata Hawke, son la sal y pimienta de la historia.

La relación entre Regina y Nicholas me encanta porque viven un flechazo y no se dan cuenta. Aunque son unos orgullosos, también entiendo el comportamiento de los dos. Sé que Nicholas se porta fatal con Regina durante su compromiso para ocultar su secreto, pero le entiendo, aunque también había otros métodos de actuar y luchar por lo que quiere. Y lo entiendo porque mientras lo leía me acordé de la historia de un joven escritor en su misma situación que vivió durante esa época, y antes de pasar por la humillación de que todo el mundo lo descubriera, prefirió suicidarse. Es por eso que entiendo sus sentimientos, quizás ahora parece una tontería su comportamiento, pero en aquella época no era fácil estar en esa situación. Nicholas quiere evitarle sufrimiento a ella pero también a él mismo, porque no podría soportar el supuesto desprecio de ella. Supongo que me gustan los protagonistas menos queridos y me sale la vena protectora al verlo tan atormentado, al fin y al cabo, su tía y su abuela con unas palabras podan haberle evitado años de sufrimiento.

Las escenas de amor entre ellos no son muy espectaculares, pero están descritas con esa gracia propia de la autora, incluso los besos tienen su magia. Me encantan los momentos en que él siente celos, cuando nunca antes los había sufrido, cosa que no le gusta. El pobre hombre no se da cuenta de que está enamorado.

El eje fundamental, tanto del libro como de la serie, son los Malory, la familia al completo. Por un lado están sus tíos serios, Jason, el cabeza de familia y tutor legal de Reggie (me niego a llamarla Regan), y Edward, el más serio y responsable de los Malory.

Y la salsa de la novela llega con los dos tíos menores. James, el más alocado -y arrogante- de todos, repudiado social y familiarmente años atrás. Y, por último está Anthony, el más encantador de los cuatro, tan parecido a Nicholas que no soporta la idea de que su sobrina sea para él puesto que conoce a los de su clase, es tan protector con ella que hace el papel más de un hermano que de un tío.

Entre los primos destacan Derek y Jeremy, que claramente tienen los genes de sus tíos menores y tienen madera de libertinos. Y hay muchos otros personajes como la doncella de Regina, el adorable Connie, la tristemente para ella celestina de la historia Selena, la insoportable madre de Nicholas, el torpe Percy... todos ponen su granito de arena para contribuir en el inicio de la serie.

Hay escenas con las que he disfrutado mucho, como su primer encuentro, cuando Tony visita a su sobrina en Silverley, cuando el archienemigo de Nicholas la hace secuestrar, el reencuentro de la família con James, la noche en la posada... muchas.

Si le pongo una pega es en el final. Porque Regina debería haberse hecho más de rogar y no perdonarle tan rápidamente, Nicholas debería sufrir un poco más por no haber sabido leer en el interior de Regina.

En definitiva, me gustó mucho la primera vez que lo leí y todas las siguientes, cosa que acabo de hacer una vez más. Un principio de serie genial y una serie imprescindible.

Supongo que pensando objetivamente se merecería un 7, pero yo le tengo que dar un 9 por las sensaciones que me provoca, por los buenos momentos y por el libro en general.