Sinopsis:
3º Libro de la serie Bevelstoke
Annabel Winslow ha llegado a la ciudad procedente de la campiña inglesa con un único objetivo: ayudar a las finanzas de su familia encontrando marido lo más rápido posible. Y ha tenido suerte. La pretende el conde de Newbury, desesperado por engendrar un heredero para su estirpe y evitar así que su título y fortuna vayan a parar a su sobrino, un canalla llamado Sebastian Grey al que desprecia profundamente. Annabel sabe que el conde representa la mejor alternativa y, a pesar de lo desagradable que le resulta el anciano, ya ha tomado una decisión.
Hasta que Sebastian se cruza en su camino. Cautivado por la frescura de la muchacha, el pícaro noble cae a sus pies sin saber que su propio tío pretende convertirla en su esposa. Aunque Sebastian no alberga interés alguno en las posesiones del conde, el destino hará que ambos se peleen por la misma mujer, una franca muchacha de provincias que se debatirá entre la seguridad económica y la pasión desbocada.
UN MATRIMONIO CON UN CONDE…
Primogénita de una familia numerosa, Annabel Winslow carga con una gran responsabilidad. Ahora que su padre ha fallecido, la única posibilidad de garantizar una buena educación para sus hermanos pasa por su propia boda con el insufrible conde de Newbury, decisión que, muy a su pesar, ya está tomada. No soporta al aristócrata, con sus repugnantes manoseos y su incansable cháchara sin sentido, pero no existe otra salida. Hasta que tropieza con un bribón que es la viva imagen de su hombre perfecto y que afirma que la adora…
…O UN ROMANCE CON UN CANALLA
Toda la sociedad londinense piensa que Sebastian Grey es un auténtico canalla. Aún así, como presunto heredero del condado de Newbury, las puertas nunca se cierran para él. Pero ahora su tío, lord Newbury, corteja a una nueva novia, una generosa muchacha de provincias que, sin duda, le proporcionará un heredero en breve. La única persona a la que parece no importarle la pérdida de fortuna y título es Sebastian. Hasta que tropieza con la mujer que Newbury quiere desposar…
Opinión personal:
Me encanta como escribe Julia Quinn, quizás sus obras no sean profundas como otras autoras, pero me hacen pasar un rato super agradable, me hace reír, y evadirme sumergida en otra época a la que me transporta a través de su pluma. Creo que hay un tipo de lectura para cada estado de ánimo y por eso muchos de mis libros favoritos están firmados por ella.
Conocimos a Sebastian en el segundo libro de esta saga, Secretos en Londres, es un libertino como muchos de los protagonistas de la romántica de Regencia, pero éste tiene la particularidad de que trabaja, aunque es algo que mantiene en secreto….y tampoco está cerrado al amor, sí, es cierto está soltero y disfruta de su situación pero no porque esté cerrado en banda al matrimonio, simplemente cree en el amor y está determinado a casarse enamorado y no lo hará hasta que no encuentre a la mujer adecuada….
Por otro lado nos encontramos a Annabel, la damisela en apuros de la historia. A pesar de que sus abuelos son de buena familia y pudientes, una “enemistad” con los padres de Annabel, hace que no estén dispuestos a mantener a sus otros nietos, (siete nada menos) ni a la madre de Annabel, por lo que parece que necesita un matrimonio con alguien rico, tan rico como para mantener a su gran familia
Y naturalmente ya se ha encontrado al candidato “perfecto” un conde que le triplica la edad y le provoca náuseas pero ella está decidida a hacer cualquier cosa con tal de sacar a su familia de la pobreza.
Hasta que debido a una casualidad conoce a Sebastian Grey y éste hace que se replantee sus firmes intenciones y deba decidir entre lo que realmente quiere y lo que debe hacer.
Julia Quinn, sabe crear historias rocambolescas, muchas veces con situaciones que parecen sacadas de un vodevil, diálogos divertidos, con protagonistas masculinos picantes y desvergonzados y este libro no es una excepción pero algunas de las cosas que he comentado y otras que prefiero no comentar hacen que no acabe de entender ciertas partes de la historia …
De los personajes secundarios, destacaré a la abuela, que me ha resultado de lo más fría, aunque de pronto y en algunos momentos muestra cierto cariño hacia su nieta que te deja de verdad un poco sorprendida más que nada porque tan pronto llega esa ternura como se va…
El personaje del Conde me ha parecido realmente desagradable, ya no solo físicamente sino de carácter, parece pretender que ser conde le da derecho a ciertas cosas, pero lo que también es del todo sorprendente es que en ciertas escenas parezca que la sociedad se lo permita, y de pronto todo ese carácter se desinfla….
Lo mejor para mí, los diálogos irónicos de Olivia y Harry y la escena final aunque la encuentre en exceso precipitada.
Puede que para mí no sea su mejor libro y que el argumento de la historia no me haya aportado nada nuevo, pero se trata de una historia sencilla y agradable que me ha sacado más de una sonrisa y me ha hecho disfrutar
Será uno de los personajes secundarios que no he nombrado la protagonista del siguiente libro de la saga???
Un besote