Virgil Skinner cumplió una condena de catorce años por un asesinato que no había cometido. Finalmente, fue absuelto. Sin embargo, no podía escapar de la banda mafiosa a la que se había unido en la cárcel para poder sobrevivir. Ellos estaban dispuestos a hacer lo que fuera con tal de impedir que contara todo lo que sabía. Y si no podían llegar hasta él, irían a por su hermana y sus sobrinos.

El Departamento de Prisiones de California necesitaba a alguien que pudiera infiltrarse en otra banda mafiosa, un grupo que se estaba haciendo con el control de la cárcel de máxima seguridad más famosa del estado. Virgil era el candidato perfecto y estaba dispuesto a hacerlo a cambio de conseguir protección para su hermana.

La subdirectora Peyton Adams se oponía a tener a Virgil en su cárcel. ¿Cómo podría protegerlo si las cosas salían mal? Además, se sentía demasiado atraída por él. Tanto, que deseaba desesperadamente mantenerlo a salvo...

Primer libro de la serie "A prueba de balas".

Creía que había leído historias de amor desarrolladas en todos los ambientes posibles, pero todavía no me había encontrado ninguna que transcurriera en el entorno carcelario. Es una circunstancia que podría resultar agobiante, pero no es así porque la mayor parte del libro se desarrolla fuera de la prisión, y tampoco esperaba encontrar una historia de amor tan bella y limpia en un ambiente tan oscuro. Ese contraste me ha gustado y me ha parecido una buena historia, bastante emocionante.

Peyton es la subdirectora de una prisión de máxima seguridad de California, es una idealista y le gusta pensar que está ayudando a mejorar la sociedad y cambiar las cosas de alguna manera. La mayoría de presos creen en ella y la respetan, en su presencia se sienten más libres de hablar que ante un hombre porque les recuerda que existe un mundo civilizado fuera. Y ella sabe manejarlos sin cometer el error de confiar en ellos. Peyton recela del plan de introducir a un topo en la prisión desde el principio, pero no puede hacer nada por evitarlo, su única opción es intentar proteger a un hombre inocente de una de las bandas más peligrosas. Lo que no esperaba era enamorarse de ese mismo hombre. Peyton me ha gustado, es una mujer fuerte y sensible al mismo tiempo, justa y sincera, que trata a todo el mundo que lo merece con respeto, independientemente de su pasado.

Virgil ha pasado catorce años en prisión por un crimen que no ha cometido, siendo víctima de una trampa de su madre y su tío, y para sobrevivir en prisión tuvo que unirse a una banda cruel. Pero tras ser absuelto del viejo crimen sus antiguos hermanos temen una traición y acosan a su hermana y sus sobrinos, y él no tiene más remedio que hacer un trato para conseguir protección para ellos. Así es como una semana después de ser liberado se dispone a entrar de nuevo en una prisión de máxima seguridad para cumplir con su parte. Irónicamente, lo que nunca había soñado conseguir, el amor y el respeto de una mujer especial, lo obtiene justo antes de empezar su misión y arriesgarlo todo. Y antes no tenía nada que perder, pero ahora sí. Virgil es el ejemplo de que el honor de un hombre no es sólo una pegatina en el hombro, es algo que nadie puede darte y nadie puede quitarte. Se vislumbra cómo era antes de entrar en prisión y cómo es ahora, y esa visión le hace más digno de admiración y respeto.

La historia de amor es muy bonita, aun cuando ellos están rodeados de lo peor de la sociedad consiguen que su amor sobreviva. Ninguno de los dos se había enamorado nunca, y al final lo hacen sin saber si podrán estar juntos algún día. Peyton no buscaba el amor y acaba encontrándolo sin darse cuenta. En cambio, Virgil no quería enamorarse porque eso le hace vulnerable, tampoco se cree merecedor del amor de alguien como ella. Pero luchan por un amor nacido en circunstancias extremas, un amor casi secreto, pues nadie debe saber que se conocen o la investigación y la integridad de Virgil correrían peligro. Es un amor simbolizado por la medalla que Virgil le da a Peyton y lo que ese objeto significa para ella, es un acto tremendamente tierno, bello y romántico en un entorno oscuro y sucio.

Hay secundarios que me han gustado mucho, como la hermana de Virgil y sus sobrinitos, que son más valientes y fuertes de lo que cabría esperar en esa situación. Y Pretty Boy, que me ha sorprendido positivamente por su capacidad de actuar y elegir, con ello se ha ganado mi respeto. Hay otros personajes que por celos o ambición actúan de la manera opuesta, creyendo que son mejores que Virgil, pero demuestran todo lo contrario.

Los últimos capítulos van ganando en acción y la novela acaba teniendo escenas emocionantes. Y al final, un epílogo precioso para remarcar que la belleza puede nacer en cualquier parte, es el final perfecto, incluso mejor de lo que esperaba en un principio.

Es una historia que combina amor, acción y un poco de suspense en un ambiente poco común en una novela romántica. Tiene momentos de emoción y de ternura y engancha desde el principio, gracias al carácter de los protagonistas y a la originalidad de la historia. Es una historia de amor sencilla que transcurre en pocos días, pero es entretenida.