Brogan Ramsay es el hijo del inmigrante irlandés y jardinero de la rica familia De Havilland. Cuando tenía 17 años se quedó pilladísimo por la hija de su jefe (cuando él también trabajaba en el jardín), Lydia, de 16.
Una noche le llega un mensaje de Lydia para que se vean en el jardín y este acude en respuesta, van al establo, una cosa lleva a la otra  ... cuando los sorprende un amigo y el hermano de Lydia   . La intención de Lydia para liarse con Brogan fue para que el amigo dejara de hacer intentonas románticas con ella   , de modo que sí, Lydia utilizó a Brogan, pero no con malas intenciones, pues parece ser que a ella realmente le gustaba Brogan. Aún así su hermano mayor no se lo toma a bien, y hace que echen a Brogan y a su familia.

Han pasado siete años y la familia De Havilland ya no es lo que era, malas finanzas y un jefe derrochador (el hermano de Lydia) hace que la empresa constructora esté en bancarrota. Un día, no sabemos cómo, llega nuestro protagonista   , echo un machomen playboy millonario (no sabemos aún cómo lo ha conseguido  ), y en una partida de póker gana a Stuart de Havilland su ruinosa empresa. De modo que ya tenemos la venganza del prota al completo si lo que quería era arruinar a los de Havilland.


Aún no se han encontrado los protas, pero ya veré qué va ocurriendo entre ellos   , porque no me extrañaría que Lydia quedara pilladísima por él, y que él le haga daño aposta   , quizás me equivoque   .

una chica de 16 años, para que el amigo de su hermano no le pida para salir, se acuesta así de primeras con un trabajador de su padre de 17??? 

al final se encamaron porque se dejaron llevar, no fue solo un par de besos para que los pillaran. Y en el fondo de todo ocurrió porque la protagonista SÍ que le quería, aunque sus intenciones al principio fueran maquinadas.

Stuart ha sido un personaje muy complejo   . De mente más débil que su hermana, se le dio todo hecho, pero eso no es lo que él quiso   .  A él le gustaba el arte y dibujar y eso para su padre nunca fue suficiente, se le impuso el cargo de empresario para cuando su padre falleciera ¿Qué pasa? Que la empresa no era muy solvente, y bajo la dirección de Stuart esta fue a pique   . Así que no me extraña cómo acabó este personaje   , de alcohol y drogas hasta arriba, y odiando a Ramsay porque su padre le quiso como un hijo (y sí habría sido digno de dirigir su empresa  ). 
Claro que cuando empieza la historia Stuart fue quien echó a Ramsay cuando lo descubrió con su hermana, y así se quitaba de encima al ojito derecho de su padre. Lo que estuvo fatal es que le ocultara a su hermana y a su padre que sí que le encontró a Brogan en el Bronx cuando ya se hubo ido Brogan con su familia.
Lo que terminó de desquiciar a Stuart fue que Brogan le ganara la empresa a las cartas   . Y lo cierto es que terminé de odiar a Stuart cuando le puso a Brogan en una situación tan difícil que este tuvo que defenderse   y con ello quizás, haber perdido a Lydia para siempre.

4 Estrellas. Otro bonito libro de Mia Sheridan que me ha hecho disfrutar muchísimo de su lectura. En esta ocasión tenemos una novela romántica que habla de la traición, la venganza, la confianza y el perdón. Como en todo libro de la autora, el peso de la misma se lo llevan sus dos protagonistas: Lydia de Havilland y Brogan Ramsay.

Lydia de Havilland pertenece a una rica e influyente familia de la Costa Este. Es hermosa, malcriada, coqueta, en resumen, una princesita. En cambio, Brogan Ramsay es el hijo del jardinero de su hacienda, un inmigrante irlandés, Brogan es un joven guapo e imponente, con un corazón demasiado bueno, y absolutamente embelesado por Lydia. De modo que en principio tenemos la historia de la chica rica, y el chico pobre que trabaja para ella. 

Todo se complicará cuando Lydia traicione a Brogan de la peor de las maneras. Como consecuencia de ello, la familia de Brogan es expulsada, terminando con las esperanzas de Brogan de un futuro mejor, y con el corazón destrozado. Tras lo ocurrido, Brogan se juró que no volvería a caer tan bajo ni suplicar, y sobre todo que se vengaría de Lydia y de su hermano Stuart.

Han pasado siete años, y nuestros protagonistas ya no son esos adolescentes que se enamoraron en un verano. Han crecido, han madurado, han cometido muchos errores, y han cambiado mucho, en todos los sentidos. Sus situaciones económicas y sociales han cambiado completamente. Tras la muerte del padre de Lydia, este le dejó la empresa a su hermano, que la ha sumido al borde de la ruina. Pese a ello, Lydia ha renunciado a muchas cosas y a su estilo de vida para que la empresa pueda sobrevivir. 

Por otro lado, Brogan Ramsay ha vuelto como alguien rico y poderoso ¿Cómo se ha hecho un nombre? ¿Cómo ha ganado tanto dinero? ¿Cómo el hijo de un inmigrante irlandés ha llegado tan lejos en tan poco tiempo? Brogan siempre fue un genio de las matemáticas, y esta cualidad le ha permitido llegar tan lejos, habiendo sacrificado mucho, y realizado una serie de trabajos vergonzosos y rastreros. Pero ahora que tiene el dinero, el poder y la influencia suficiente, puede llevar a cabo su venganza. Y la primera ficha que mueve será ganarle a Stuart a las cartas su empresa familiar.

La vida de Lydia ha cambiado mucho, mientras su hermano hunde el negocio, ella se ha visto obligada a economizar en sus gastos, pero tras perder la Stuart la empresa, a Lydia no le queda más remedio que apelar a Brogan para que no les deje en la miseria, y así será cómo ambos protagonistas volverán a encontrarse tras siete años, y Brogan seguirá maquinando para humillarla y hacerle pagar lo que le hizo.

Brogan reconsiderará su oferta, pues le llena de júbilo ver de nuevo a Lydia, la mujer que amó y que le destrozó la vida, humillada y suplicándole. De modo que le ofrecerá trabajar en su casa como sirvienta, y deberá hacer todo lo que él quiera y diga sin quejarse. A pesar de todo, Lydia se traga el orgullo y acepta, con tal de que la empresa de su padre no se hunda y sus empleados conserven su trabajo. 

El primer tercio de la novela ha sido el momento en el que se pone más énfasis en la venganza de Brogan, y ves ese odio y resentimiento fruto de la traición. Pero poco a poco, el corazón de nuestro protagonista se ablandará, cuando descubra que no todo fue tan crudo o traicionero como pensaba, y sobre todo cuando vea que no sólo él sufrió tras lo ocurrido, si no que Lydia también recibió de lo suyo.

Como no podía ser de otra manera, el tiempo que deberán pasar juntos, mientras Lydia esté a su servicio será el que determine el desarrollo de su romance. Sí, han pasado siete años, pero todo queda atrás cuando ambos se den cuenta de que nunca dejaron de amarse. Y ese romance es lo que más me gustado de la novela. Todas las novelas de Mia Sheridan tienen ese toque de ternura, un romance que surge espontáneamente entre dos personas que se atraen, o en este caso, que parte de una situación complicada, cuyo romance es imposible.

Aunque la novela me ha gustado mucho gracias a estos dos fuertes personajes, ha habido una serie de cosas que complicaban su historia que me han tenido muy enfadada, por un lado Stuart, el hermano de Lydia, que me ha parecido totalmente aborrecible, hasta que me ha terminado dando lástima. Una serie de personajes del pasado de Brogan, en este caso mujeres, de las que nunca nos gusta ver en la novela romántica, pero si no existen estos conflictos ¿Cómo se desarrolla la historia?

Los secundarios también han aportado su granito de arena, y haré especial mención a Eileen, la hermana menor de Brogan, que aunque no ha tenido mucho protagonismo, me ha encantado en todas sus apariciones, pero sobre todo al mejor amigo de Brogan, Fionn, pues no solo es su amigo; es su hermano, el hombre que ha estado siempre con él apoyándole, y en cierto modo ha sido la voz de su conciencia ¿De verdad no hay libro para Fionn? Porque creo que se lo merece.

No es la mejor historia de Mia Sheridan, pero me ha gustado mucho, y me ha hecho enamorarme tanto de ella como de las otras. No me ha parecido aburrido, como he leído en algunas críticas, ni he visto que la venganza pase de refilón, no. Todo este libro habla de la venganza, y de lo que hizo Brogan para destruir las vidas de Lydia y Stuart, pero estamos ante una novela romántica al fin y al cabo, de modo que ¿Hasta dónde llegará Brogan?

Por mi parte he quedado encantada, y estoy deseando saber cuál será el siguiente libro de Mia Sheridan que nos publique la editorial.

Lo que más me gusto fue cuando Lydia tiene que servir en la fiesta de Brogan y enfrentarse a sus antiguas amistades, lo describio tan bien que yo misma podia sentir como se sentia ella y lo bien que salió parada, dejandoles a cuadros..mi mente penso - un minipunto para Lydia 🤣🤣🤣


Lo que menos me gusto fue el final, para mi gusto demasiado enrevesado, sobre todo la muerte de Stu (aunque era un Ca***n)

Pues el principio me ha recordado a la antigua magia, o a tantos otros de dama rica/chico pobre. Por ahora estamos iendo de topicazo en topicazo, pobre tio buenorro, chica rica guapísima y familia que se meter por el medio. A la vuelta, el pobre ya es rico y la rica es pobre. Vamos nada nuevo. Voy por que ella ha ido donde trabaja el y el le ha hecho la "proposición" de que sea su chica para todo. Pos por ahora no esta mal, pero porque todo esto esta escrito por Mia Sheridan y es un gusto leerla, peeeero mas de lo mismo a ver si mete algun giro bueno, sino será una novela mas de las que no te acuerdas exactamente de que iba porque has leído ya varias iguales.

Ya lo acabé y la verdad que me gustó. No dan muchos rodeos, ambos admiten bastante pronto que realmente se quieren . La venganza, pues al final no resulta tan veganza del todo, porque en el fondo Brogan es un blandito (aiiii que me lo como) Lidya me ha gustado como protagonista, fuerte, segura y sabiendo en todo momento estar. De Stuart que vamos a decir, le ha tocado el papel de malo, ella era buena, el padre tambien, la hermana tambien sin resentimientos (excepto la torta que le da, chica, como hermana se tuvo que quedar ancha de cruzarle la cara, no estoy a favor de la violencia, pero Eileen se quedo agusto), al final todos buenos, el pobre Stuart les sobraba y pum muerto, con la última traba en la relación. Conclusión, libro entretenido pero no memorable.