"Amor eterno" es el segundo libro de la saga de Sherring Cross.
Argumento
Lachlan, en vista de la ruina en la que ha caído su clan tras perder toda su fortuna por su madrastra, decide ir a Inglaterra a encontrar una esposa rica. De esta forma, y ayudado por su tía política, acude a casa de los duques familiares de ésta.
Para su sorpresa, allí encuentra a Megan, la mujer por la que lleva suspirando desde que la conoció y, a pesar de estar casada y él necesitar una rica heredera, cambia sus planes con el propósito de conseguirla.
En medio, también está Kimberly Richards, una mujer que tras salir del luto por su madre, se encuentra con que su prometido desde nacimiento ha roto su compromiso. Su padre, que pretende casarse, necesita sacarla de la casa para evitar el enfrentamiento entre dos amas de casa. Y entre esto y que él es un padre tiránico, Kimberly quiere desaparecer cuanto antes. Por eso acaba también en casa de Megan, al acordar su padre que los duques podrán ayudarla a casarse mejor que él.
Nada más llegar, se topa con Lachlan y el encuentro entre éste y Megan que ya da indicios de lo que él siente por Megan. Pero ésta es una mujer felizmente casada y por la situación de las dos personas con las que tiene que hacer de casamentera, urde un plan para unirlos.
Consigue que poco a poco Lachlan se fije más en Kimberly incluso llegando al punto de acostarse con ella en una noche en la que ambos habían bebido y creyendo erróneamente que ella le invitaba. Cuando despiertan a la mañana siguiente, Kimberly piensa que Lachlan va a casarse con ella, pero presencia otra escena de seducción de Lachlan y el rechazo de Megan. Tras esto, Kimberly le pone en claro que ella no quería acostarse con él y que la ha deshorrado, con lo que eso supone en su búsqueda por un marido. Lachlan se ofrece a casarse con ella, pero Kimberly se siente ofendida al ver que es el "segundo plato" y le rechaza.
El tiempo en la casa de los duques sigue transcurriendo y Lachlan se da cuenta que su proposición de matrimonio era más seria de lo que pensaba puesto que se ha enamorado de ella sin darse cuenta. Pero es demasiado tarde porque Kimberly ya no quiere saber nada de él y sigue intentando conocer a su futuro marido.
Y para Lachlan, intentar conseguirla ahora, podría ser algo que incluso le lleve a la cárcel.
En mi opinión, mejor que el primero con mucha diferencia. Éste libro te mete en la trama enseguida y más al saber que la relación de los protagonistas parte con el enamoramiento de Lachlan con otra.
Lo que más me ha gustado es ver cómo interactúan los dos y cómo van cambiando los sentimientos de Lachlan a medida que avanza la historia.
A diferencia del otro, me gustan los dos protagonistas y se aprecia mucha más química entre ellos que los protagonistas del anterior libro.