La apasionada Ravenna Caulfield solo quiere alejarse de las mezquinas jóvenes de la alta sociedad.

El atractivo y heroico lord Vítor Courtenay solo quiere vivir una peligrosa aventura tras otra.

Ravenna, a pesar de sus excusas para evitar los actos sociales, no puede evadir una fiesta campestre que organiza un príncipe portugués buscando esposa. Y cuando pensaba que no podría ser peor, se queda aislada por la nieve en el castillo lleno de vírgenes conspiradoras… ¡La peor pesadilla de la joven se ha hecho realidad!

Pero de repente un beso robado en un establo, la aparición de un cadáver dentro de una armadura y otro gran número de aventuras escandalosas, envolverán a Ravenna y Vítor en un misterio que estarán dispuestos a resolver. Sin embargo, Vitor desea algo más y no está dispuesto a dejar que Ravenna se escape… ¿Qué puede suceder cuando se une un misterio con los enigmas del amor y la pasión?

Segundo libro de la serie «Se busca príncipe».

«Hay un hombre muerto dentro de esta armadura». Esa es la frase, pronunciada por la protagonista, que convierte lo que podía haber sido una fiesta más para cazar marido en una aventura.

Tenía este libro fichado desde que nos lo presentaron en un evento de próximas novedades de la editorial. Lo que me llamó la atención fueron las circunstacias en las que se desarrolla la historia: un castillo aislado que queda incomunicado, un asesinato y unos invitados que se convierten en potenciales sospechosos.

No es una circunstancia nueva para la literatura, pero en novela romántica sólo he encontrado un caso similar, y muy bueno, por cierto.

El caso es que hay un surtido con la combinación de romance y suspense, pero no de romancce y misterio —buen misterio—. Porque no, suspense y misterio no son lo mismo. Y en mi opinión esta novela homenajea a las historias de Agatha Christie, incluso en el inicio hay un glosario de sospechosos mencionados por orden de aparición. Me recuerda también a tantos casos de «Detective Conan» que me resultó una lectura irresistible, ineludible.

Más que expectativas, tenía «mono» de una historia así.

De hecho, no soy una admiradora de Agatha Christie en concreto porque siempre nos «miente». Sin embargo, esta mezcla de misterio y romance me parecia de lo más apetecible.

Y después de esta percepción exclusivamente personal debo decir que las buenas sensaciones que me daba esta novela se han cumplido.

Quizás influya el hecho de que llevo un tiempo en el que me cuesta encontrar buenas lecturas o soy yo, que no me engancho.

Quizás ayude la escasez de novela romántica histórica que tanto me gusta.

Lo que cuenta es que he disfrutado mucho con este libro y lo he acabado en lo que me han parecido unas pocas horas.

Ravenna es un personaje interesante porque no es la típica dama de la época, algo justificado, porque hasta hace poco era una chica salida del orfanato y adoptada por un vicario que trabajaba cuidando a los animales de un barón. Hasta que su hermana mayor se convirtió en duquesa recientemente, un cambio al que a ella le cuesta adapatarse. Es una especie de médico y veterinaria, valiente e indómita, que no quiere cambiar de vida por su nueva situación.

También quiero hablar de la presentación del personaje, que nos cuenta el inicio de su amor por los animales y su carácter protector, y ha hecho que me caiga bien desde el principio. Y ese amor que sentía por Bestia ha sido conmovedor.

Vitor es el hermanastro ilegítmo del príncipe, por una parte es inglés y por la otra portugués. Esas raíces le llevaron a trabajar durante la guerra para los dos bandos para ayudar a sus dos familias. Vitor fue un héroe en busca de aventuras, pero éstas también le llevaron a la contemplación y la meditación en un monsaterio. Esas dos formas de vida describen la personalidad de Vitor.

Dado que casi toda la novela transcurre en la estancia en el castillo, su romance no puede ser un cortejo largo, pero me ha gustado la forma en la que se van conociendo a la vez que investigan el crimen. Su historia ha sido bastante bonita y, aunque la loalización sea casi siempre la misma, no falta la aventura.

En cuanto a la trama del asesinato no puedo decir si es o no previsible, o si el asesino es o no esperado porque cualquier cosa que dijera sería dar una pista. Sólo diré que me ha gustado la forma en que la autora ha llevado el tema, que no es una historia descuidada. Y también es bastante equilibrada porque a la vez que tiene un gran peso, no le quita presencia a los protagnistas, al contrario, es la excusa que necesitan para pasar tiempo juntos.

Por las mismas razones que no puedo hablar demasiado del asesinato, tampoco puedo hacerlo de los personajes secundarios, porque son sospechosos como bien nos indica la lista inicial. Pero sí que ha habido personajes entrañables y personajes odiosos, también los ha habido que resultan indiferentes.

Una cosa que me ha gustado del final es que la trama de misterio queda resulta antes que la romántica, así se puede centrar en ella sin prisas y con el resto perfectamente cerrado.

Ha sido una historia que he disfrutado mucho como amante de los romances históricos, los asesinatos misteriosos y los viejos castillos.