Fantástica escribió:

Será "Por un Beso" de Julia Quinn

Caliente, caliente Fantástica...pero no es ese

Seduciendo a mr Bridgerton?

Me parece que va a ser "El Corazón de una Bridgerton"

fantastica yo diria que si

Fantástica escribió:

Me parece que va a ser "El Corazón de una Bridgerton"

¡Pues claro que sí, niñas!

Te toca Fantástica

Vale, ahí va otro:



MUJERVALIENTE se dió la vuelta con los nervios crispados... y se encontró frente a la sólida columna que era el cuerpo del duque. Retrocedió medio paso apenas, alzó el mentón y se irguió cuan alta era.
GUAPOYDESCARADO no reculó y ella se mantuvo firme, tarea nada fácil, ya que el torso fornido del duque la tapaba por completo, y a tan escasa distancia, no dejó de observar con fascinación la musculosa figura que tan bien realzaban sus ropas.
- Excelentes reflejos- dijo él-. Si no fuera una mujer, aceptaría su reto. Sobre los sopapos, quiero decir. O sea, los ojos mo...
- Ya sé lo que quiere decir.
- Sin duda es muy útil tener un extenso vocabulario- dijo él-. Sin embargo,en el futuro le recomiendo que haga uso de su razón , por ínfima que sea, paloma mía, antes de usar la lengua. Espero que sea capaz de hacerlo. Porque, verá, otro en mi lugar podría considerar divertido aceptar sus pequeños retos. en cuyo caso, se vería envuelta en una pelea muy distinta de lo que esperaba. ¿Entiende lo que le digo, niña?
MUJERVALIENTE abrió mucho los ojos.
- Oh, Dios mío, no- dijo sin aliento-. Es usted demasiado complicado para mí, excelencia. Mi diminuto cerebro no puede asimilarlo.
- Quizá el sombrero le aprieta demasiado -dijo el duque, con los ojos brillantes. Acercó las manos a las cintas que sujetaban el sombrero de MUJERVALIENTE, pero se detuvo a unos centímetros.
- Yo de usted no lo haría -dijo ella sin alterarse, pero con el corazón latiendo con fuerza en su pecho.
GUAPOYDESCARADO se echó a reir y tiró de las cintas del sombrero.
MUJERVALIENTE le lanzó un puñetazo. Él la agarró por la muñeca y, sin dejar de reir, la atrajo hacia su fornido corpachón.
Ella en realidad esperaba algo parecido, percibía que iba a suceder, pero no estaba preparada para el calor ni la explosión de sensaciones inidentificables que le hicieron perder el equilibrio.
En unos instantes tenía la boca aplastada contra la del duque, cálida, firme y demasiado experta, y caía hacia atrás, desorientada e impotente bajo su presión engañosamente ligera. También le perturbaba la sensación de la manaza del duque apretando su espalda, y de su calor, que traspasaba varias rígidas capas de bombasí y ropa interior, y de un calor más intenso por debajo, donde el musculoso brazo de GUAPOYDESCARADO le rodeaba la cintura.
Durante unos instantes de peligro, la mente de MUJERVALIENTE cadió a la par que sus músculos, sobrepasada por el calor y la fuerza y la caótica mezcla del olor y el sabor masculinos.
Pero MUJERVALIENTE había agudizado el instinto en la dura escuela de la calle, y supo reaccionar a tiempo. Se quedó flacida entre los brazos del duque, convirtiéndose en un peso muerto.
Notó entonces que él apartaba la boca.
- Cielo santo, se ha desmayado...
MUJERVALIENTE le dió un puñetazo en la mandíbula.

No recuerdo haberlo leído, pero lo leeré..

pricesa escribió:

No recuerdo haberlo leído, pero lo leeré..

A mi me pasa igual

Ainsss..¿Por qué todos estos duques tienen que estar tan buenos y ser tan ocurrentes? ...

Ness escribió:

pricesa escribió:

No recuerdo haberlo leído, pero lo leeré..

A mi me pasa igual

Ainsss..¿Por qué todos estos duques tienen que estar tan buenos y ser tan ocurrentes? ...

me uno a vosotras

tiene buena pinta¡¡

Todo por un beso de Loretta Chase

Loanna escribió:

Todo por un beso de Loretta Chase

Sííí!!! Es ese, lo estoy leyendo ahora mismo y está muy bueno!!!

Te toca Loanna!!!

venga cachito

Ahí va:

Cuando estuvo instalado en el asiento de felpa burdeos, ella se arrodilló sobre el suelo, entre las piernas del caballero. De pronto se sintió incómoda porque la herida se encontrase en tal lugar, y sus mejillas enrojecieron ante la apurada situación en que se encontraba. Dudó sobre la manera exacta de proceder, hasta que un nuevo hilo de sangre manó por los pantalones claros.
—Esto es de lo más embarazoso... —murmuró el hombre. En su voz había más dolor que incomodidad y XX reaccionó con pura compasión. La herida estaba justo en la entrepierna, en el interior del muslo izquierdo.
—Ha tenido mucha suerte —susurró XX—. La bala lo ha atravesado. Si pudiera rasgar la tela un poco...
—¡Me los arruinará! —El hombre pareció ofendido por la sugerencia y XX se enderezó para mirarlo—. ¡Mis botas! ¡Tenga cuidado con mis botas!
Parecía al borde de la desesperación.
—Tranquilícese —repuso ella con voz calma—. Por favor, ¿puedo rasgarle un poco los pantalones?
Él inspiró profundamente, alzó los ojos al cielo y asintió brevemente. —Si no hay más remedio —se resignó.
XX asintió y sacó una daga diminuta del escondite en que la tenía, a la altura del tobillo.
Él la observó y sonrió por primera vez.
—¿Siempre viaja tan bien preparada, señora?
—Del lugar de donde venimos, es normal que una deba tomar todas las precauciones —explicó ella.
Resultó extremadamente difícil introducir la punta de la hoja debajo de los ajustados pantalones. La tela parecía moldeada sobre la piel del hombre y Caroline pensó que le debía resultar terriblemente incómodo sentarse.
Trabajó con diligencia hasta que consiguió rasgar la tela a la altura de la unión de las piernas para luego rasgarla del todo, hasta que toda la carne quedó expuesta.
El caballero, notando el inusual acento de la bella mujer arrodillada delante de él, reconoció en su voz ronca el hablar de las Colonias.
—¡Ah, es de las Colonias! Me han dicho que es un sitio de bárbaros...
¡Ay! —gritó cuando XX empezó a examinar los bordes de la herida—. No es de extrañar que viaje con un arsenal encima.
Ella lo miró y replicó con sorpresa:
—Es verdad. Soy de las Colonias, pero no es por eso que llevo armas, señor. No, no —añadió meneando la cabeza—. Vengo de Londres.
—¿Londres? —dijo él, nuevamente confundido.
—Sí. Habíamos oído muchas historias sobre las cosas que pasan allí. Incluso hasta Boston llegan las historias de los innumerables asesinatos y robos que se cometen. Esto es un nido de decadencia y corrupción, ¿no le parece? Mi prima y yo prometimos que nos cuidaríamos todo lo que hiciera falta. Una buena decisión, teniendo en cuenta esta infamia el mismo día de nuestra llegada.
—¡Ah! Yo también he escuchado historias parecidas sobre las Colonias — respondió él con un gruñido—. Londres es mucho más civilizado, mi querida y equivocada señora.
Su tono era demasiado condescendiente para el gusto de XX.
Aunque no pensaba amilanarse por eso.
—Usted defiende su hogar y supongo que eso es honorable de su parte — contestó con un suspiro. Dirigió su atención nuevamente a la pierna del herido antes de que éste pudiera pensar una respuesta apropiada y le dijo— : ¿Podría quitarse la corbata?
—¿Perdón? —dijo él, y se mordió el labio inferior, por lo que XX supuso que el dolor se había agudizado.
—Necesito algo para detener la hemorragia —explicó ella.
—Si alguien se enterase alguna vez de esto me sentiría humillado más allá de... Ser herido en tan delicada zona, que una dama vea mi condición y, encima, utilice mi corbata... ¡Dios mío, es demasiado! ¡Demasiado!
—No se preocupe por la corbata —dijo XX con la voz que usaba para sosegar a los niños pequeños—. Usaré un pedazo de mi enagua.
El caballero seguía con la mirada un poco extraviada y protegiendo su preciosa corbata de XX, quien se obligó a mantener una expresión piadosa.
—Y prometo que no comentaré a nadie este desafortunado incidente. ¡Ni siquiera sé su nombre! ¿Ve cuán simple es todo? A partir de ahora lo llamaré... señor George, por su rey. ¿Le parece apropiado?
La expresión de enfado en los ojos del hombre se volvió más intensa, y XX supo que ese nombre no era para nada apropiado. Por un momento se sintió perpleja y luego lo entendió.
—Por supuesto, dado que su rey está enfermo, tal vez otro nombre le vaya mejor. ¿Qué tal XY? —Él asintió y dejó escapar un largo suspiro.
—Bien —dijo ella. Se levantó y bajó del carruaje para rasgar una tira de la parte inferior de su enagua.

este me suena a Johana Lindsey, de los Mallory
pero no recuerdo cual de ellos podrá ser

Nop`... segurísimo que NO lo leí



Besotes

Juana

Deseo rebelde de Julie Garwood??

tampoco lo lei

Fantástica escribió:

Deseo rebelde de Julie Garwood??

Si es este, no lo he leído. Que tal es

pricesa escribió:

Fantástica escribió:

Deseo rebelde de Julie Garwood??

Si es este, no lo he leído. Que tal es

Yo tampoco lo leí, si es ese es la investigación al poder La sinopsis parece interesante y Julie garwood es muy buena, así que igual lo agrego a la lista aunque no sea este...

Fantástica escribió:

Deseo rebelde de Julie Garwood??

Siii

Te toca!!!

pricesa escribió:

Fantástica escribió:

Deseo rebelde de Julie Garwood??

Si es este, no lo he leído. Que tal es

Pues la verdad al principio está muy bien, por lo menos a mi me enganchó pero después hacia la mitad se me hizo un poco aburrido, aunque tiene algunas escenas entretenidas. Para mi no es de los mejores de la Garwood pero se lee con facilidad.

Va:

— No soy muy partidaria de los perros y no tengo ninguna intención de quedármelo. Sólo me daba pena.
HOMBRETON se puso en pie y metió las manos en los bolsillos traseros del pantalón.
—Tal vez quiera quedárselo un tiempo. Puede hacerle compañía cuando... —Se detuvo de golpe.
—¿Cuando me derrumbe? —preguntó SOFISTICADA con sequedad—. Le aseguro, señor HOMBRETON, que no suele darme por ponerme a llorar todas las tardes.
—No quería decir eso, señora. —Pasó el peso de una bota a otra con agilidad, pese a que se sentía incómodo—. Y me llamo HOMBRETON.
SOFISTICADA ladeó la cabeza mientras le examinaba.
—¿Nadie le llama por su nombre de pila? ¿Cómo era? ¿TAL?
—Sip. Pero casi todo el mundo me llama HOMBRE.
—¿De pequeño también? ¿Cómo le llamaba su madre?
—No lo sé. Murió cuando tenía tres años; apenas la recuerdo.
—¿Cómo le llamaban en el colegio?
—HOMBRE.
—¿Y su mujer?
—La mayor parte de las veces me llamaba hijo de p**a, señora. —La taladró con sus oscuros ojos—. Sobre todo poco antes de que me abandonara.
Vale, así se daba una conversación por finalizada.

Mujer a la fuga de Lisa Marie Rice

a mi tambien me suena a ese