Chicas... ¿jugamos?

Creo que no conozco a TIOBUENOCONFUNDIDO, pero tengo ganas de conocerlo Chicas... ¿jugamos? - Página 28 742647

Some like it wicked ( Pasión diabolica ) de Teresa Madeiros.. Juntar dedos

Sandra, a parte de los HQ, también no se pueden poner libros que están publicados solo en ingles... ^^º

Tienen que ser libros publicados ya en español. Por qué no nos saltamos este y pones otro ?? Wink

pricesa escribió:: Some like it wicked ( Pasión diabolica ) de Teresa Madeiros..

Sandra, a parte de los HQ, también no se pueden poner libros que están publicados solo en ingles... Tienen que ser libros publicados ya en español. Por qué no nos saltamos este y pones otro ??

no no pon tu Juntar dedos

solo crei que eran los harlequines ^^º

en fin perdon a todas Please

Sandra escribió:

pricesa escribió:: Some like it wicked ( Pasión diabolica ) de Teresa Madeiros..

Sandra, a parte de los HQ, también no se pueden poner libros que están publicados solo en ingles... Tienen que ser libros publicados ya en español. Por qué no nos saltamos este y pones otro ??

no no pon tu Juntar dedos

solo crei que eran los harlequines ^^º

en fin perdon a todas Please

No pasa nada cariño!! Wink

Te lo decía por qué una vez yo también hice lo mismo y no era valido.. Jiji

Pero volví a poner otro, así que sigue tu.

venga siguientes... que ganas de que lo publiquen es castellano..

que sea en castellano y que fácil

venga va aqui va cachito :perfecto:

y facilito :perfecto:

-¿Por qué sigues aquí? -le espetó ella-. ¿Estás esperando a que entre alguien para comprobar la veracidad del escabroso relato de CRIADA? Seguro que cuando salgas en el corredor te encontrarás a diez criadas que habrán venido para eso. ¿Por qué decepcionarlas?
Él hizo caso omiso del sarcasmo.
-Estoy esperando oírte decir que te casarás conmigo.
-¿Me he perdido algo, ESCOCESIRRITANTE? ¿Acaso no te han encontrado en mi cama como si fuese tuya? En cuanto el duque se entere, no habrá alternativa.
No fue la mención de DUQUE lo que hizo saltar de la cama a ESCOCESIRRITANTE, claramente disgustado. Tampoco era su intención escandalizar a RESIGNADA, pero lo consiguió.
Ella se puso como la grana. Era todavía muy nueva en las relaciones amorosas como para aceptar con naturalidad la visión de la rotunda masculinidad de ESCOCESIRRITANTE.
-Aunque nadie se hubiera enterado, tampoco habría alternativa, RESIGNADA. Pero aún no te he oído decir que te casarás conmigo, y no me iré hasta oírlo.
Esto la hizo salir de su estupor.
-¡Sí, me casaré contigo! Y espero que estés contento, pero no te durará mucho la alegría. Cuando mi padre se entere...
-Yo me ocuparé de tu padre, cariño, no temas -dijo él con tono de autosuficiencia.
Ella iba a decirle que no sabía con quién tendría que vérselas, que no tendría sencillamente que enfrentarse a un padre indignado, sino a una verdadera fiera. Pero estaba demasiado furiosa para extenderse en explicaciones, y de todos modos ya se lo había advertido. Si él lo tomaba a la ligera...
-¿Sabes una cosa, RESIGNADA? -prosiguió ESCOCESIRRITANTE mientras buscaba la ropa y empezaba a vestirse-. Ahora me parece que si dices que estabas conmigo la noche en que robaron los caballos, no te creerán. Pensarán que tratas de protegerme. De modo que nosotros no tendremos más remedio que encontrar al verdadero ladrón.
En aquel momento RESIGNADA no se sentía muy propicia a hablar de ese tema, y optó por no contestar. Sólo deseaba que él se marchara lo antes posible, a fin de afligirse y lamentarse a sus anchas. Pero la mirada que le lanzó indicaba claramente que aquel «nosotros» estaba fuera de lugar.
Con dolor, advirtió que la mirada de él denotaba todo lo contrario.
Cuando ESCOCESIRRITANTE salió de la habitación, sólo había ocho criadas merodeando por el corredor.

no lo sé pero me da que esta bueno de leer risa malvada

Amor eterno de Lindsey

Mau escribió:: Amor eterno de Lindsey

si mau te tocaa :perfecto:

venga mau

La inquieta luz de la vela iluminaba la larga distancia del corredor... el empinado descenso de las escaleras... una puerta esmaltada de blanco coronaba las sombras.
—¿Quién es? —preguntó, con el corazón a punto de explotar.
Más golpes hacían vibrar la puerta.
Una advertencia. Una promesa.
Sólo podía ser MARIDO
Ahora tendrían la discusión que deberían haber tenido doce años atrás.
XX le quitó el seguro a la puerta y la abrió de par en par.
—MARIDO...
Unos ojos negros por las sombras la miraron fijamente por debajo de un sombrero empapado por la lluvia.
—Parece que siempre soy el otro hombre, señora XX.
Una oleada de gases de brandy chocó contra el rostro de XX.
—Está borracho.
XY se tambaleaba delante de ella. Se sintió decepcionada: debería ser MARIDO el que golpeara a su puerta, no ese hombre.
Se aferró a la fría y húmeda madera.
—Es tarde, señor XY.
—Un abogado y la ley son muy parecidos —respondió XY, sosteniendo su oscura mirada. —Tiene una oportunidad con la justicia. Si cierra esta puerta, pierde esa oportunidad.
—Le agradezco la consideración...

Llanto de pasión de Robin Schone? Pensar

Ni idea..

Me uno a las que no tienen ni idea Chicas... ¿jugamos? - Página 28 198644

Sandra escribió:: Llanto de pasión de Robin Schone?

Muy bien!!! Te toca, Sandra

venga sandra

Pues lo apunto Mau, que sonaba interesante

aqui va cachitooo :perfecto:

— En tus años de vida, —comenzó a decir con un tono de retintín—Supongo que no has aprendido nada sobre el robo, ¿verdad?
— Una cosa o dos. —Admitió MALHUMORADO.
— Bien. —Pareció algo aliviada— Por que todo lo que sé sobre ello es lo que he visto por la TV.
MALHUMORADO arqueó una ceja, pero ya que esta vez él sabía que ella no podía verlo, dijo en un tono solemne.
— Uno nunca lo creería.
— Es la verdad. —Le dijo con seriedad.— Me gusta bastante la policía, y solamente me fijo en ellos. Espero haber conseguido lo que necesitamos. No estaba segura. Solo me metí en una ferretería y agarré todo lo que me parecía útil.
Ah. Esto explicaba por qué ella no había asistido a la reunión. MALHUMORADO se arrodilló a su lado y miraron detenidamente lo que había en su mochila. La primera cosa que él vio fue varios objetos largos, puntiagudos. Se parecían a los destornilladores, pero con la punta afilada. Había varios de ellos, en varios tamaños.
— ¿Leznas? ¿Para qué son?
— Son afiladas, con su punta rompían cosas por TV. —Explico APAÑÁ— Para abrir cerraduras. —Ella hizo una pausa, con expresión pensativa.— O con las tarjetas de crédito. —Frunció el ceño brevemente, entonces maldijo.— Ya sabía que debería de haberme traído el monedero.
MALHUMORADO realmente no le prestaba atención; siguió revisando el bolso.
— ¿Una llave tubular? —Preguntó, levantando la más grande, un pesado instrumento de fontanero.
APAÑÁ se mordió su labio y cambió de posición incómodamente.
— Pensé que tal vez si no podías abrir las cerraduras, podrías romper una ventana.
MALHUMORADO arqueó su otra ceja, luego sacó un rollo...
— ¿Cuerda? ¿Y Cuerda, APAÑÁ? ¿Para qué necesitamos la cuerda?
— En caso de que tuvieras que salir por una ventana del segundo piso. —Explicó defensivamente.
— Es un edificio de una planta. —Indicó.
— Oh, sí. —Miró detenidamente al edificio descontenta, como si el edificio hubiera perdido una planta mientras ella no lo miraba.
— Pensé que habías investigado el lugar.
— Y lo hice. Solamente... —Ella agitó sus manos nerviosamente—. De acuerdo, no tendrás que bajar por ninguna ventana. Podrías atar a alguien, no crees.
— Hmm. —MALHUMORADO alcanzó el siguiente artículo.— ¿Cinta aislante? —Sacó un rollo de la cinta plateada. Incluso en la oscuridad, podía ver su rubor.
— Papá siempre me decía que no había trabajo donde la cinta anti-conducción no fuera práctica. —Dijo sin mucha convicción. Luego enderezó sus hombros y agregó.— Puedo pegar los cristales antes de que lo rompas, si tienes que romperlo. Esto reduciría el ruido y los cristales. O si tenemos que atar a alguien, con la cinta sería imposible desatarse.
— Pensé que la cuerda era para atarlos.
— Vale. —Dijo con irritación.— Usa la cuerda para atarlos. Puedes utilizar la cinta para amordazarlos y así tener sus bocas cerradas.
MALHUMORADO casi se rió en voz alta, pero logró contenerse. Obviamente ella había considerado cada eventualidad. Excepto una. No necesitaba ninguna de estas tonterías. Metió todos los objetos dentro de su mochila, MALHUMORADO la cerró, y se levantó.
— Espera aquí. —Ordenó. Se acercó por el callejón a la puerta lateral.
Como siempre, la mujer no le escuchó, ya que fue detrás suyo. Su voz le salió alarmada cuando preguntó.
— ¿Qué vas a hacer?
— Lo que vinimos hacer aquí. —Contestó.— Robar en el banco de sangre.
Él llamó a la puerta.