Se me encogió el corazón con la historia de Phoebe, entre su padre, su primo (vaya par)

Me hizo reír, con Pooh y con las descripciones de los atuendos, ese discursito a los jugadores.

Me dieron ganas de ponerme a gritar con Dan y sus jueguecitos con Valerie y después con la angelical Sharon, que en mi opinión es demasiado perfecta, tiene paciencia para estar todo el día rodeada de niños pequeños, hacerles galletas, todo ideal. Menos mal que luego se da cuenta de lo que tiene enfrente, que no es la mujer ideal o lo que él cree que es su ideal, sino una persona con un gran trauma, que busca lo mismo que busca él, pero que tiene muchos muros que derribar.

Me sorprendió el personaje de Ron, que parecía un tío calladito, servicial y en el fondo cuando le pinchan es todo un carácter, también los jugadores cada uno con sus historias, sus novias y sus mujeres, y Molly que dejó de estar en la burbuja que la tenía su padre y se transforma en una adolescente normal, después de entender y perdonar a su hermana.

Y por supuesto odie al primo con todas mis fuerzas.

En fin, pensé que con tantos personajes sería pesado de leer, pero como las tramas de los secundarios son claras, se me hizo muy ameno, hasta me dieron ganas de saltar cuando ganan el partido.

sobretodo en la primera escena, el perro y el entierro me tronche