4'5 Estrellas. Me ha gustado mucho, muchísimo. Se ha convertido en mi libro favorito de Lorraine Heath. Si le he dado las 5 estrellas es porque ha conseguido no decepcionarme, y a la vez convencerme de que puede ser una de las grandes. Y es que aquí, señoras mías, tenemos una gran novela.

Tras mi chasco con el libro de Tristan, debo decirlo, mis expectativas iban muy bajas. Imagino que por eso me ha sorprendido que éste libro haya estado a la altura. Durante las dos anteriores novelas, hemos vislumbrado cómo debía haber sido la vida del hermano menor, Rafe Easton, para que tuviera un carácter tan esquivo y frío con todo el mundo, pero sobre todo con sus hermanos. En cierto modo ha sido el libro más esperado de la trilogía. A mí me ha convencido, y estoy segura de que no seré la única.

¿Y qué tenemos aquí? No voy a mentiros, es un cliché, pero tan bonito, tan romántico, tan esperanzador. Es una renovación de la historia de la Bella y la Bestia. Tenemos a Evelyn, la hija bastarda de un noble, y a Rafe, un hombre que tuvo que forjarse en lo peor que el mundo podía ofrecer, y que en cierto modo le convirtió en una bestia.

La historia empieza cuando el padre de Evelyn muere, éste le hizo prometer a su hermano que cuidaría de ella, por supuesto, él la odiaba por lo que representaba y no sólo no cumplió su promesa, si no que se deshizo de ella de la peor manera que podéis imaginar. Por las circunstancias, Eve acaba viviendo con Rafe Easton en calidad de amante. Él es muy claro con su trato, estará dispuesta para él en el momento y como él quiera, con él nunca le faltará de nada y podrá disponer de todo lo que quiera. Y como en todo cliché imagino que sabréis cómo acabará la cosa.

Decir que sus protagonista me han encantado es quedarse corta. Evelyn se ha convertido en una de mis heroínas de romántica favoritas, cuando empieza el libro es prácticamente una niña inocente, demasiado inocente para su propio bien, dada su condición de bastarda, aunque fue amada y protegida por su padre, éste la mantuvo ignorante del mundo y vivió en una jaula dorada. Con Rafe madura, se convierte en mujer, pero en una mujer buena y honesta, que realmente me ha convencido del amor que profesa a Rafe. En cuánto a Rafe ¿Qué voy a deciros? Se come el libro con papas. Es tan frío, tan huraño, tan distante... decir que su vida fue dura es quedarse corto, y no es el único protagonista de novela romántica que conozco que ha tenido un pasado similar, pero creo que Lorraine Heath ha sabido captar muy bien y transmitir el dolor y la desesperación que vivió Rafe. Precisamente por lo que vivió, desechó de su persona el cariño y el amor, para él no existe, él no puede dar amor, y no es merecedor de ello, pero aysss... eso es lo que él piensa, porque chicas, Rafe es amor en estado puro, puede que él no lo sepa, que no lo diga con sus palabras, pero está en sus acciones, en esos pequeños detalles, que dicen más de él de lo que cree.

Y por una vez, puedo deciros que no hay insta-love. Es un romance que crece poco a poco, del roce al cariño, o eso dicen. En las primeras miradas hay gusto, en sus palabras hay deseo, pero éste irá muy lentamente, cocidito a fuego lento, como a mí me gusta. Me ha encantado, el libro en sí, el romance, los personajes, y sí, la intervención de todos los hermanos, pues tienen mucho que decirse, y sus escenas me han resultado de lo más enternecedoras. El libro ha quedado cerrado y bien cerrado, y me ha parecido una conclusión magnífica de la trilogía. 

Para las que no lo hayáis vislumbrado, ésta serie tiene algunos guiños con los "Huérfanos de St. James", serie que estoy deseando retomar, sobre todo tras la intervención de algunos de sus personajes secundarios.

Por mi parte he quedado encantada, y seguiré teniendo la obra de Lorraine Heath en mi lista de preferentes, aunque me dé historias reguleras (pues aseguro que me las ha dado, y muy malas), también me ha dado unos libros maravillosos que merecen la pena, y éste ha pasado a uno de mis libros románticos favoritos.

Y es que, después de que ella lo abandona, parece que todo se precipita. De pronto, él le confesa su amor, los hermanos hacen las paces, y ya...
¿Habéis tenido la misma sensación, o me ha pasado solo a mi? Creía que él se lo tenía que curar un poco más, volver a conquistarla, pero todo ha ocurrido como ,,de golpe,,.
Pero aún así, es una historia que me gustado mucho.

Todo se precipita porque ella le ama, le pide más de lo que él puede ofrecer, y cuando ve que no es correspondido se escapa   . Y sí, ella hizo bien. Porque Rafe es de estos chicos cabezones que sólo se dan cuenta de lo que tienen cuando lo han perdido. Ahí es cuando se da cuenta de que la ama y quiere recuperarla. Después vino el secuestro y los días que Dimmick le estuvo torturando   . Los únicos pensamientos que Rafe tenía era para con Eve, y en caso de salir de ésta ganársela. Pero no le hacía falta porque Eve ya estaba enamorada de él 

El romance
La relación con los hermanos
El secuestro

El romance y el secuestro sí me pareció hilvanado   . Y bastante lógico.

La relación con los hermanos no tanto, esperaba quizás algo más, un grado de aceptación. En el epílogo es obvio que en algún momento acabó perdonándolos.

esperaba una conversación más larga entre ellos, tanto tanto tanto le repite que no la puede querer que luego se termina todo en un párrafo... y ella le dice.. vale 
A ver, ya sabemos que ambos están enamorados, pero creo que se merecía una escena mejor 
No sé, se han pasado toda la novela así, para que no se merezca una extensión mayor. Es mi opinión
Tampoco sé qué pinta ella en eese antro... lo normal es que vayan los hombres a rescatarlos y ella se quede en casa, no... estamos hablando de que no saben qué se van a encontrar, en el peor barrio de londres y con un tío que es de lo peor   y nadie se cuestiona que ella no vaya 

Lo de los hermanos, también me ha matado.... tres novelas!!! en las que él no los aguanta, reniega de su condición y luego nos mete un epílogo en el que los tres navegando tan felices 
Eso no hay derecho

Al final, todo se apaña en un visto y no visto Un capitulillo más para apañar al menos la relación entre los hermanos, no hubiera estado mal

También me ha dado rabia que a Rafe lo pillaran desprevido dos veces: primero el hermano idiota con el cuchillo y luego en Dimmick este de las narices ¿Nosé da cuenta de que es una persona muy odiada? En fin, se lo perdono porque lo que le pasa a Rafe es que es demasiado bueno y joven para su bien

El tema de que él engorda con los dulces...por fin un héroe un "poco humano"

A mí también me llamó la atención que Lorraine Heath se atreviera a meter ése detalle tan poco usado en protagonistas masculinos en novela romántica  . 

Él decía que cuando era pequeño era más bien gordito   , algo normal en uno niño de buena familia. Y cuando acabó en el hospicio y en la mina dice que quedó atrapado porque no podía correr igual de bien que otros niños. Pero aunque adelgazó muchísimo debido a las malas condiciones, siempre ha tenido propensión a engordar   . Le encantan los dulces y el chocolate pero no se pasa, porque si no la ropa le asfixia y le aprisiona y no le gusta por lo que le pasó